Antes se solía decir que se ganaba media Liga cuando estaba casi hecha la victoria matemática en el campeonato nacional. Así que como faltan 14 jornadas para finalizar la temporada, se podía afirmar que el Barça ganó ayer domingo un cuarto de Liga, al menos, como poco.
Los culés vencieron por 1-0 al Valencia en crisis y aunque el resultado fue pírrico y volvió a demostrar que el conjunto de Xavi ya no es el equipo imparable que comenzó el año a lo grande, defiende bien y es un muro atrás. Si además puede marcar y ganar encuentros, mejor que mejor. Justo lo que le falta al Real Madrid, que ahora se queda a 9 puntos de los azulgrana tras tropezar en Sevilla.
Los de Ancelotti siguen en crisis de resultados, al menos en territorio nacional, y no pudieron pasar del empate sin goles en el Benito Villamarín ante el Betis. Los de Pellegrini repitieron el esquema que está haciendo daño a los blancos en este trampo de temporada: un autobús bien firme atrás y no dejar que el Madrid tenga espacios para sus contras y las carreras de Vinicius y las combinaciones de Benzema.
La kriptonita del Madrid ya está bien encontrada por todos los equipos y le saben jugar a eso: desesperar a los blancos atrás sin dejar tocar a sus jugadores, no conceder huecos e intentar una contra matadora, porque a diferencia del Barça, el conjunto capitalino sí que concede varios fallos en defensa en cada partido. Además, no funcionó la llamada 'unidad B', con jugadores como Camavinga, Lucas Vázquez o Tchouaméni en el once inicial. Se echó mucho de menos a Modric, que estaba sancionado.
9 puntos que parecen muchos... pero es cierto que este mes tenemos todavía uno de los 3 Clásicos de marzo y es en el campeonato de Liga. Al Madrid parece que sólo le queda asaltar el Camp Nou y reducir a 6 las distancias. El goalaverage es, de momento, favorable al conjunto blanco, que ganó 3-1 en octubre a los culés. Por supuesto, una victoria madridista en Barcelona dejaría este duelo directo resuelto, por lo que en caso de empate a puntos la Liga sería para el Madrid.
¿Qué le queda a cada equipo?
De momento, a ambos les espera una semana de descanso que les sabrá a gloria tras un arranque de 2023 inmisericorde. Prácticamente han jugado partidos cada 3 días, de media, entre Copa del Rey, Supercopa de España, Champions o Europa League y, por supuesto, Liga.
El próximo fin de semana el Madrid recibirá al Espanyol, esperando retomar la senda ganadora y olvidar la sequía de cara a la meta rival. El Barça, sin embargo, tiene una salida complicada en San Mamés, aunque el Athletic está en el peor de momento de la temporada. En la siguiente semana, el 19 de marzo, día del padre, el mencionado Clásico que será bastante decisivo.
Después, al Madrid le esperan partidos como el Valladolid y el Villareal en casa (ambos consecutivos, sin viajar), partido en Cádiz, recibir al Celta, viajar a Girona, recibir al Almería, ir al campo de la Real Sociedad...
Al Barça, salida a Elche, recibir al Girona, visitar al Getafe, recibir al Atlético de Madrid, ir al campo del Rayo, recibir al Betis y al Osasuna...
La útlima jornada podría decidir el campeonato. El Barça viajará a Vigo y el Madrid recibe al Athletic de Bilbao.
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Si (
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