Después de varias semanas de largo silencio, tras haber tocado fondo en los sondeos de opinión, el omnipresidente francés Nicolas Sarkozy está de vuelta como en los mejores tiempos de su campaña electoral, dispuesto a reconquistar su popularidad. Acompañado de su esposa Carla Bruni, acudió Sarkozy esta semana al mercado de abastos parisino de Rungis, en las afueras de la capital.
No fué Sarkozy para hacer sus compras de la semana con precios al por mayor, no. La carestia de la vida es una realidad, pero en el Palacio del Eliseo se nota menos. Fué en cambio el Presidente dispuesto a entrar en contacto con esa Francia que “se levanta temprano por las mañanas”, que no manifiesta, ni quema coches ni otros vandalismos. La pareja presidencial que desde la llegada de Carla, desprende glamour por doquier, evitó sin embargo acercarse al pabellón de los pescadores, profesión muy afectada actualmente, así como los transportistas, los taxistas y los agricultores, por el alza brutal del precio del petroleo que se ha multiplicado por dos en tan solo un año.
Esas profesiones, pero también todo ciudadano que va en coche al trabajo, o las familias y jubilados con excasos recursos que deben pagar la factura anual de la calefacción, se ven afectados por ese alza, en este pais en donde las tasas que el Estado cobra sobre el petroleo son además muy elevadas, mas de la mitad del precio del carburante que se paga en la gasolinera va a las cajas del Estado, que sin embargo nos siguen diciendo que “están vacias”.
En busca de soluciones Sarkozy, tira pelotas fuera como en el futbol, y acaba de proponer a los demás países europeos “una baja del IVA sobre el precio del petroleo en toda Europa”, para compensar el alza del crudo. Una propuesta poco realista si se piensa que exige la unanimidad de los 27 paises de la Unión y que su aplicación en el mejor de los casos llevaria un par de años de negociaciones y votos en Bruxelas.
En su propio gobierno le salen a Sarkozy voces discordantes con el tema de la energia y el petroleo, pues Nathalie Kosciusko-Morizet, Secretaria de estado para medio ambiente, acaba de intervenir en el parlamento para reclamar que cese la dependencia energética de los hidrocarburos, en beneficio de otros tipos de energia mas ecológicos, menos contaminantes. Pero en espera de ese mundo mejor, la misma Comisión de Bruxelas acaba de lanzar una campaña con diez consejos para economizar carburante, mientras que en nombre del liberalismo económico se opone a las ayudas del Estado a los sectores afectados por la crisis del petroleo.
Cuando Francia se dispone a ocupar la presidencia de la Union Europea en el mes de julio, Sarkozy se enfrenta aquí a una dificil situación social, pues todas sus “reformas” sobre el Derecho del trabajo, la Televisión pública, la prolongación a 41 de los años de cotización para poder jubilarse, la Educación nacional, la reducción del gasto público, etc, están todavia por llegar, y sin el indice de crecimiento económico que nos habian anunciado durante la campaña electoral. Al contrario por vez primera desde la creación del euro, en este 2008 los gobiernos europeos han reconocido por fin que la inflacion ha aumentado. El consumidor de Francia o de Navarra ya lo sabía cuando iba a comprar al mercado, sin necesidad de ir al de abastos. Nadie habla todavia aquí de política de rigor, pero ¡caray! se parece mucho. Sin embargo los directores generales de las grandes empresas francesas cotizadas en el CAC 40 han visto aumentar sus ingresos este año en 58%, lo decia ayer la televisión, y si ellos lo dicen...
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