www.diariocritico.com

Diario de una pesadilla (15)

domingo 05 de abril de 2020, 12:22h

El psiquiatra y neurólogo vienés Viktor Frankl nos dio un camino cuando escribió: “El hombre en busca de sentido”. Máxime cuando él había sobrevivido a distintos campos de concentración nazi, entre ellos, los de Auswichtz y Dachau entre 1942 y 1945.

Sin ser el más fuerte y el más sano, sobrevivió. No así toda su familia que fue muriendo poco a poco en aquel horror de la Segunda Guerra Mundial. Y llegó a la conclusión de que logró superar todas aquellas penalidades tan solo porque le puso un objetivo a la vida. Primero, aceptó la situación y después decidió que había que llenar de dignidad y generosidad el camino. A un hombre le pueden robar todo, pero no le podrán quitar jamás su actitud ante la desgracia. Ponerse un objetivo o incluso varios pequeñitos que vayamos logrando alcanzar poco a poco, nos va dando aliento y fortaleza para continuar. Saber que no podemos fallar, en una determinada fecha, a una persona de nuestro entorno y que deberemos estar allí junto a ella; aprender varias frases en un idioma que no es el nuestro; plantearnos caminar durante media hora en un espacio reducido porque queremos conservar la salud; aprender aquello que siempre hemos deseado y nunca hemos tenido tiempo; ayudar a nuestro entorno a superar esta situación; hacer más fuertes a los demás, acaba haciéndonos más fuertes a nosotros mismos. Un objetivo, un camino…desear conseguirlo y pelear para lograrlo.

En este día 5 de abril, domingo de Ramos, confinados en nuestras casas, encontremos un sentido a todo esto. Peleemos por aquello que nos hace ilusión: ver nacer a un nieto; asistir a la boda de un hermano; ver entrar en la universidad a nuestro hijo; cuidar de nuestro padre o nuestra madre hasta que supere esta circunstancia; esa palabra de ánimo, ese sentido del humor que nos hace pasar del llanto a la risa; esa actitud ante la adversidad que nos llena de dignidad. No podemos abandonarnos en el sofá de nuestras casas. No. Hay que ponerse en pie. Cambiar nuestro objetivo y poner una meta a todo esto. Y mientras tanto, ayudemos a los demás a ser fuertes y a encontrar su camino.

Hoy, ya que hay que estrenar algo por ser domingo de Ramos, os animo a poneros el traje invisible del optimismo y la positividad. No más lamentarnos, no más regodearnos en el horror. Salgamos de esa espiral donde nos hemos metido, con fuerza y coraje. Hagamos clic en nuestro cerebro, cambiando nuestra meta. ¡De esta vamos a salir! Tenemos que estar en el cumpleaños de nuestro ser querido; no me quiero perder la sonrisa de mi nieto; voy a subir la moral de los que ya están enfermos. Voy a superar todo este desastre con esa fuerza que saca el ser humano desde dentro de sí mismo. Tú querido lector eres más fuerte de lo que habías pensado nunca. ¡Ánimo! Hoy ya es un día menos…¡Lo vamos a conseguir!

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios