La herencia de Francisco Franco ascendió a 28,5 millones de pesetas de la época, el equivalente a 1,8 millones de euros que fue a parar a su mujer, Carmen Polo, y su hija Carmen, tal y como muestra el testamento firmado el 20 de febrero de 1968 al que ha tenido acceso en exclusiva el diario 'El Mundo'.
De su legado, destaca su patrimonio formado por varias fincas e inmuebles, así como sociedades y cuentas.
Entre ellas, un valioso palacete señorial ubicado en el municipio de Sada (La Coruña) y el controvertido Pazo de Meirás, residencia de verano del dictador que la familia trató sin éxito de vender el año pasado tras verse obligada a abrirla al público unos días al mes.
En la actualidad, el Pazo de Meirás sigue siendo motivo de disputa ya que el Gobierno socialista de Pedro Sánchez inició este verano un procedimiento vía Abogacía del Estado tras tras la aparición de un acta notarial de 1938 que desmontó la versión de los Franco sobre la adquisición del pazo. El inmueble, junto con las parcelas aledañas, se valoró en su día en 14 millones de pesetas, lo que hoy se traduciría en más de 840.000 euros.
Asimismo, el matrimonio contaba con una sociedad que acumulaba 28.500.315 pesetas (171.290 euros), cerca de 1.780.000 euros, teniendo en cuenta la actualización del IPC; a lo que sumar 1.004.890 pesetas, lo que hoy serían 62.693 euros, en diferentes cuentas bancarias; así como acciones en distintas empresas valoradas en cerca de un millón y medio de pesetas, equivalente a cerca de 91.000 euros actuales.
El testamento -firmado 8 años antes de su fallecimiento- recogía además un apunte sobre el futuro de sus restos dejando "a la libre determinación de sus herederos" todo lo relativo a su entierro, funeral etc. Es decir, en ese momento no se determinó si su ataúd debía estar en el Valle de los Caídos, en la tumba del cementerio de Mingorrubio (El Pardo) a donde recientemente ha sido trasladado, o en algún otro lugar.
Hay que recordar que el 24 de diciembre de 1961, Franco sufrió un accidente de caza que daría inicio a numerosas especulaciones sobre la salud del dictador y el debate sucesorio. En el mes de julio de 1969 las Cortes ratificaron a Juan Carlos de Borbón como Príncipe sucesor, pero desde unos meses antes Franco ya estaba preparando su tumba en El Pardo.
- El Pazo de Meirás podría expropiarse
La noticia fue muy criticada en redes sociales como se puede apreciar con esta recopilación de tuits a modo de ejemplo:
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