Para ello, Camacho ha reclamado el voto al PP, el único partido que, según ha dicho, puede sacar a Zapatero de la Moncloa, y que al mismo tiempo evitará que un gobierno de la Generalitat con una amplía mayoría lleve a Cataluña hacía una "deriva independentista".
Los populares esperan que las elecciones de este domingo en Cataluña supongan el inicio de un cambio en toda España que se manifieste en los próximos comicios municipales del mes de mayo y acaben con el presidente del partido, Mariano Rajoy, instalado en la Moncloa tras las generales de 2012.
De ahí que la dirección del partido se haya volcado en la campaña, como demuestra que Rajoy haya pasado hasta siete días en Cataluña, y que una amplía representación de la dirección y de los líderes territoriales del partido hayan pasado por la comunidad.
La candidata del PP a la Presidencia de la Generalitat ha erigido a su partido como el "voto útil" en las elecciones de este domingo, por lo que ha pedido a los catalanes que "se olviden de los prejuicios y los estigmas" que puedan cernirse sobre los populares.
Como antídoto a estos prejuicios, Camacho se ha remitido a la situación de Cataluña cuando el PP gobernaba en España y "sacó a Cataluña y a España de la crisis", algo que, según ha dicho, volverá a hacer a partir de este domingo en Cataluña.
La dirigente popular ha asegurado que los catalanes "no necesitan una jornada de reflexión" porque ya han decidido que no quieren seguir con José Montilla al frente de la Generalitat, por lo que ha insistido en advertir del riesgo de que CiU salga de las elecciones con una mayoría cómoda.
Camacho ha cerrado la campaña de su partido con un mitin ante más de 400 personas en Barcelona y arropada por sus hermanos, en un ejemplo más del toque personal que la candidata ha querido dar al último día antes de la jornada de reflexión, donde también ha visitado su ciudad natal de Blanes (Girona).
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