La líder del la Unión Cristianodemócrata (CDU), que sucedió a la actual Canciller alemana al frente del partido en diciembre de 2018, anunció ayer que no se presentará a las elecciones federales del próximo año.
La renuncia se produce tras la crisis interna abierta en la coalicióndespues de que la rama regional de la CDU en Turingia, un estado en la zona oriental de Alemania, junto con el partido ultraderechista Alternativa Por Alemania (AfD) apoyasen la elección como presidente estatal de un dirigente del Partido Democrático Libre (FDP), siendo la primera vez que un presidente gana con el apoyo de AfD, rompiendo el consenso entre los partidos tradicionales que perdura desde la postguerra.
El apoyo del la CDU irritó a sus socios de coalición del Partido Socialdemócrata (SPD). Merkel dijo que la rama regional de la CDU en Turingia rompió con los valores del partido y subrayó que su formación no debería participar de un gobierno estatal presidido por el presidente del FDP rompiendo la convicción fundamental mantenida por la CDU de que no puedan lograrse mayorías con la ayuda de la AfD.
Merkel califico la situacón como inexcusable y que debería revertirse. La crisis complica el liderazgo de la CDU con la vista puesta en las elecciones federales que deben celebrase antes del 24 octubre de 2021. Una crisis que también se dejará notar en la UE y que tuvo su reflejo ayer en el euro.
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