La mayor victoria deportiva de la historia del fútbol femenino español se vio empañada por el comportamiento del entonces presidente de la Federación de de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, al darle un beso en la boca sin consentimiento a una de las futbolistas de la selección, Jenni Hermoso.
El hecho tuvo lugar durante la entrega de medallas y el Gobierno español y las instituciones deportivas internacionales no tardaron en censurar la forma en la que actuó Rubiales, que se vió acorralado y pidió perdón en un vídeo a las pocas horas.
No obstante, lejos de terminar ahí la polemica, este suceso centró la atención en las jugadoras de la selección española, que se unieron bajo el lema: "Se acabó".
Y a raíz de esto, se logró la dimisión de Rubiales y la destitución del que fuera el seleccionador de 'La Roja' femenina, Jorge Vilda. Junto a otros cambios solicitados por las jugadoras en la misma estructura de la RFEF.
Incluso el alto comisionado de la ONU elogió a las futbolistas españolas por "plantarle cara a la dominación opresiva y patriarcal".
Mariona Caldentey: "Queremos estar en los JJOO, pero hacerlo en las condiciones que creemos que merecemos". Esta misma semana, Hermoso lanzó una reflexión: "Fuimos campeonas del mundo porque era la única manera de ser escuchadas y respetadas".
El programa de 'La Sexta' presentado por Gonzo, 'Salvados' ha entrevistado a otra de las líderes de estas reivindicaciones, la mejor jugadora del Mundial, Aitana Bonmatí.
En algunos avances del programa se pueden escuchar algunas de las observaciones de la futbolista del Barça. Una de ellas es sobre el prácticamente inexistente apoyo que recibieron de futbolistas masculinos. Preguntada por si esperaba más apoyos, respondió con un contundente: "Pues no, la verdad que no".
Fueron pocos los futbolistas que mostraron su apoyo cerrado a sus compañeras y los internacionales que lo hicieron fue mediante un comunicado bastante tibio.
En la 'cadena SER', la periodista Àngels Barceló fue muy clara a la hora de criticar este comportamiento de los hombres y aseguró que el fútbol masculino "se mantiene en la caverna".
Bonmatí revela que ni ella ni sus compañeras esperaban demasiado, por lo que estas escasas muestras de apoyo no las sorprendieron.
Además, sobre la petición de condiciones profesionales, explicó: "No pedimos ni mucho menos cobrar lo mismo que los hombres, pedimos unas condiciones dignas".
Cambios en la federación
La tormenta terminó de desatarse en la última convocatoria de la Selección, cuando 39 futbolistas, entre ellas casi todas las campeonas del mundo emitieron un comunicado en la previa de dicha citación solicitando no ser convocadas.
Sin embargo, se hizo caso omiso a su voluntad en la primera convocatoria de la nueva presidenta de la RFEF, Montse Tomé. Se vivieron entonces unos días de incertidumbre ante la posibilidad de que muchas de ellas no se presentaran.
Finalmente, entre la RFEF y la mediación del Consejo Superior de Deportes (CSD) se las consiguió convencer a todas para que acudieran.
En Oliva (Valencia) se mantuvo una reunión hasta altas horas de la madrugada entre las partes, donde finalmente se llegó a un acuerdo entre la institución y las jugadoras. (A excepción de 2 de ellas, Mapi León y Patri Guijarro, que no habían acudido al Mundial por voluntad propia y mantuvieron su primera decisión y tras acudir a las reuniones abandonaron la cita).
Algunas de las primeras medidas que se han tomado en el entorno de la RFEF y del fútbol de categoría femenina son la destitución de antiguos empleados de la Federación y la incorporación de nuevas caras a departamentos como Comunicación o Marketing y la creación de un Departamento de Igualdad.
Si (
No(_66335bb799879.jpg "El Dortmund da la sorpresa y golpea primero en la semifinal (1-0): el PSG y Mbappé se la juegan en casa")
.jpg "Crítica de la obra de teatro 'La madre': la infelicidad se instala en casa")
