Vivimos dentro de la era digital y las criptomonedas son un parte fundamental de la misma, siendo un tema que sigue creciendo en interés. Pero solo uno de cada 20 españoles, un 5%, tiene algún tipo de criptomoneda, según un estudio que ha hecho Funcas, el centro de análisis de investigación económica y social. Este nos enseña que el campo de las criptomonedas va lento pero sigue en constante crecimiento en nuestro país.
Bitcoin (BTC) es la criptomoneda que más se conoce en España, con el 40% de los encuestados con criptomonedas teniendo alguna cantidad de la moneda digital pionera. Le sigue, algo por detrás, Cardano (ADA), que se encuentra en poder del 25% de los usuarios españoles de criptomonedas, y Ethereum (ETH), muy cerca, con un 24% de los participantes diciendo poseer esta moneda.
El estudio también habla sobre otras criptomonedas que tienen los españoles, aunque en cantidades mucho menores. Por ejemplo, Solana (SOL), una blockchain de alto rendimiento que se diseñó para soportar aplicaciones descentralizadas y contratos inteligentes a escala global, y que es admirada por su velocidad y bajos costos de transacción.
Polkadot (DOT), por otra parte, es una plataforma que busca la interoperabilidad entre diferentes blockchains, logrando que estas se conecten y puedan compartir información de manera segura y eficiente. Dogecoin (DOGE), que al principio fue considerada una “memecoin” o "shitcoin", es una criptomoneda que se creó como una especie de parodia en 2013. Aunque en sus inicios se pensó en ella como una broma, Dogecoin ha ganado bastante popularidad y cuenta con una historia de fluctuaciones extremas de precios.
Por ejemplo, la criptomoneda tuvo un aumento enorme en su valor tras el interés mostrado por Elon Musk, CEO de Tesla, incluso mencionando Dogecoin en varios tweets y apariciones públicas, lo que volvió a demostrar el gran impacto que las redes sociales y las personalidades influyentes tienen en los mercados de criptomonedas.
Perfil del inversor de criptomonedas: joven con ingresos altos
El análisis de Funcas da también una visión detallada del perfil típico del inversor en criptomonedas en España. Se trata de una`persona, por lo normal, joven, generalmente hombre, que se encuentra estudiando o trabajando y cuenta con unos ingresos mensuales altos. Así, más del 8% de los usuarios de criptomonedas en España son hombres, en comparación con solo el 1,9% que son mujeres.
Este grupo de personas se encuentra mayoritariamente en la franja entre 18 y 28 años, con ingresos superiores a los 5.000 euros al mes. La motivación principal de la gente que invierte en criptomonedas es la posibilidad de conseguir ganancias potenciales, a pesar del riesgo que esto conlleva. Casi el 80% de los usuarios de criptomonedas en España tienen estos activos con fines de inversión, mientras que el porcentaje que las utiliza como método de pago se reduce por debajo del 1%.
El estudio de Funcas también estudia cómo el entorno económico puede afectar a la adopción de criptomonedas. Se ha descubierto que los tipos de interés altos tienden a correlacionarse con precios más bajos en el mercado de criptomonedas y un menor interés en estos activos. Este fenómeno hace pensar que la volatilidad y los riesgos asociados con las criptomonedas hacen que bajen mucho los inversores en tiempos de incertidumbre económica.
La investigación destaca una correlación negativa entre los tipos de interés y los precios de las criptomonedas, señalando que un aumento en los tipos de interés puede llevar a una bajada en el valor de las criptomonedas y en el apetito por estos activos.
A pesar del interés en aumento, muchos españoles todavía tienen reticencias sobre invertir en criptomonedas debido al miedo a perder dinero. En este contexto, las criptomonedas más baratas pueden convertirse en una excelente opción para aquellos que quieren iniciarse en el mundo de las monedas digitales sin comprometer demasiado capital. Estas criptomonedas dan una puerta de entrada accesible, haciendo que los nuevos inversores puedan familiarizarse con el mercado sin un riesgo financiero muy grande.
La adopción de criptomonedas más baratas no solo baja el riesgo de pérdida, sino que también hace que los inversores puedan aprovechar oportunidades de crecimiento potencial. La tecnología blockchain, aunque sigue en expansión, ha demostrado que es una inversión viable a largo plazo. Para aquellos interesados en probar en esta tendencia, es básico mantenerse informado y solo confiar en fuentes confiables y transparentes.
La adopción de criptomonedas en España se encuentra en una fase incipiente, con solo el 5% de la población invirtiendo en estas monedas digitales. Sin embargo, el creciente interés y la diversificación de las carteras de criptomonedas hacen ver un futuro prometedor. A medida que más personas conozcan la tecnología blockchain y las criptomonedas, es probable que veamos una subida en su adopción.
El presente artículo no constituye asesoramiento sobre inversiones.
La inversión en criptomonedas puede implicar un alto riesgo y sus posibles pérdidas pueden ser sustanciales.