El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, en una entrevista en 'Radio Nacional', ha explicado que la reforma de las pensiones es urgente y pide a los agentes sociales acelerar la negociación porque el Gobierno se comprometió con Bruselas a hacerlo como parte del plan de recuperación y la recepción de fondos.
"Los agentes sociales son conscientes de que tiene que tramitarse como ley y nos hemos comprometido a que esté este año, por lo que los plazos van muy justos", expuso.
Escrivá recordó que las negociaciones llevan en marcha 6 meses sin consenso, y "no sé si llegamos" para cumplir plazos.
El ministro ha reconocido que en la reforma que plantea se eliminará la conocida como "paguilla" de los pensionistas, la cantidad que los jubilados reciben como compensación por la diferencia entre la inflación estimada por el Gobierno y la subida real posterior de los precios.
Estimación del IPC
Para solucionarlo, cree que el sistema definitivo debe ser emplear el IPC el año anterior y no por estimaciones que luego se deben compensar por el margen de error: "La pensión se revalorizará cada año con el IPC del año anterior. De esta forma, evitamos el problema de tener que trabajar con inflaciones esperadas".
El ministro alertó de que "superaremos los 200.000 trabajadores con toda seguridad" en el mes de mayo, que ha precisado que, con los ajustes estacionales, el repunte neto será de 50.000 cotizantes medios a la Seguridad Social.
Para ello recordó que ,ayo es un mes "tradicionalmente bueno" para la afiliación por las contrataciones que se realizan de cara al verano, una situación que sí se está dando este año, frente al mayo de pandemia de 2020.
Sobre los trabajadores en ERTE, ha subrayado que la dinámica también es "muy positiva", pues este mes cerrará con un descenso de cerca de 100.000 trabajadores en ERTE. En este sentido, el jueves pasado la cifra de trabajadores en ERTE rondaba los 550.000, frente al millón que había en enero de este mismo año.
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