Un acuerdo para liberar las patentes del cabotegravir de acción prolongada (LA), un tratamiento inyectable (PrEP) de prevención del VIH, ayudará a permitir el acceso a fórmulas genéricas de este producto en los países menos desarrollados, de bajos ingresos y de menores ingresos. Son en su mayoría del África subsahariana, donde precisamente el virus más golpea.
La PrEP es un método muy eficaz para la prevención del VIH, pero hasta hace poco tiempo solo estaba disponible en forma de pastillas, que se tomaban a diario o, en algunos casos, antes y después de las relaciones sexuales. El cabotegravir es un avance importante, ya que puede proporcionar 2 meses de protección continua contra la infección por VIH a través de una sola inyección intramuscular.
El acuerdo fue anunciado el jueves por Medicines Patent Pool (MPP), fundado por la organización Unitaid en 2010, para facilitar el acceso asequible a productos genéricos de calidad garantizada. Este pacto brindará a los fabricantes seleccionados la oportunidad de desarrollar, fabricar y suministrar versiones genéricas de cabotegravir en 90 países donde se dan más del 70% de todas las nuevas infecciones por el VIH, con datos de 2020.
Este anuncio se produce solo 7 meses después de la primera aprobación regulatoria de cabotegravir y se espera que el acuerdo contribuya para permitir el acceso a escala a suministros genéricos de menor costo del producto en un tiempo récord.
Nuevas infecciones
Cada año, aproximadamente 1,5 millones de personas se infectan con el VIH en todo el mundo, principalmente entre las personas que viven en países de ingresos bajos y medios.
Los esfuerzos para aumentar el acceso a cabotegravir tendrán un impacto especial para los grupos que experimentan tasas de infección particularmente altas, como hombres que tienen sexo con hombres, trabajadores sexuales, mujeres transgénero, niñas adolescentes y mujeres jóvenes.
En el África subsahariana, el epicentro de la epidemia del VIH, la tasa de infección por VIH de las adolescentes de 15 a 19 años es 6 veces mayor que la de sus pares varones.
Si bien la PrEP oral ahora está disponible en muchos países, los desafíos relacionados con la adherencia y el estigma han limitado su impacto en la mayoría de las poblaciones. El acceso a una opción eficaz de prevención del VIH de acción prolongada podría contribuir significativamente al objetivo de poner fin a la transmisión del VIH y a la epidemia para 2030.
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