El rastro de cientos de cadáveres en la ciudad ucraniana de Bucha tras la retirada de las tropas rusas ha permitido conocer el horror de su paso por el lugar.
Hay un rastro de cadáveres donde se ha podido apreciar que muchas personas, incluidas civiles, fueron ejecutadas incluso estando maniatadas. También ha habido violaciones.
Se reclama de manera internacional que estos hechos sean juzgado en la Corte Internacional de Justicia de La Haya como algo más que crímenes de guerra: crímenes de lesa humanidad.
Esta ciudad, próxima a Kiev, ha mostrado a personas tiroteadas a corta distancia estando maniatadas.
El presidente ucraniano, Volodomir Zelensky, ha calificado los hechos de "genocidio" y pide responsabilidades y compromiso común de la comunidad internacional contra Rusia por estos horribles acontecimientos.
Torturas, profanación de cuerpos...
Zelensky asegura que muchos de los cuerpos sin vida fueron aplastados por los tanques. También habla de torturas hasta la muerte, mujeres con los pendientes arrancados a tirones de sus orejas... Hombres y mujeres fueron ejecutados delante de los niños, asegura.
Se encontró una fosa común con al menos 75 cuerpos y en los alrededores de Bucha se encontraron 410 cadáveres de civiles.
"Mataron a civiles mientras estaban allí y cuando salían de estos pueblos y ciudades", denuncia el Ministerio de Exteriores ucraniano.
La ONU encargará una investigación sobre lo sucedido mientras que Rusia niega los hechos y habla de "montaje" ucraniano y de "provocación" de los radicales de este país invadido. Está dispuesto a debatirlo en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
"El Ministerio de Defensa de Rusia refuta las acusaciones del régimen de Kiev sobre el presunto asesinato de civiles en la localidad de Bucha", afirma el gobierno de Putin.
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