Cuando se gana con la derecha, es la derecha la que gana

“Cuando el progresismo actúa unido es Chile el que gana”, relevó. “He tenido a la Democracia Cristiana siempre presente en el apoyo a mi persona y a nuestro gobierno y eso lo valoro como nadie”. Destacó el apoyo, “especialmente en el caso de Soledad Alvear, quien ha hecho una valiente defensa del gobierno” y agregó que “conociéndola y a la directiva que encabeza, siempre supe que tendría en ustedes, camaradas democratacristianos, ‘una espada y un escudo’, como diría Radomiro Tomic”.

La Jefa de Estado manifestó que “como Presidenta de Chile, tengo la certeza de contar con el apoyo de una coalición fuerte para poder gobernar, y tengo la misma certeza de que sin la Democracia Cristiana, no hay Concertación”.

En ese sentido, sostuvo que “aplaudo la reflexión, la crítica y respeto mucho los diferentes puntos de vista. Pero, eso sí, hay momentos para discutir, para decidir y momentos en que hay que jugarse por entero por lo que creemos en común y, ahora, es el momento de jugarse por entero”, sentenció.

Del mismo modo, la Presidenta dijo que “tengo plena conciencia de la importancia que tiene que el gobierno colabore en representar adecuadamente el equilibrio entre los componentes de la Concertación.  A mis colaboradores, ministros y ministras, les exijo que escuchen, que dialoguen, que se sienten y se reúnan con la Concertación. No quiero que haya excepciones”, insistió.

Puntualizó que “es en los momentos difíciles o de dudas, cuando la Democracia Cristiana parece crecer y mostrar porqué ha sido un partido que ha marcado con liderazgo el rumbo de Chile por décadas”. Y subrayó que “sin duda la DC ha contribuido sólidamente a la construcción y renovación del progresismo”.

En otro plano, afirmó que “tenemos un ambicioso programa de avance social y desarrollo que estoy empeñada en cumplir. Di mi palabra que lo haría y la palabra de mujer se cumple”.

Expresó que “no voy a ocultar los problemas que se nos han presentado. Hay que ser humildes en el reconocimiento de los errores, pero fuertes y decididos en implementar soluciones y salir adelante”.

En ese sentido, dijo que “el Transantiago no ha sido una excepción. De cara al país he sido extremadamente dura y franca en reconocer la situación producida. He asumido la responsabilidad como Jefa de Estado. Ahora, de lo que se trata ya no es seguir con diagnósticos, sino asegurarnos de sacar la tarea adelante y asegurar y garantizar que los acontecimientos como esos no volverán a ocurrir”, manifestó.

Bachelet señaló que “lo cierto es que tenemos un Estado llamado a ser garante de derechos ciudadanos y gestor de políticas cada vez más ambiciosas. Un Estado que no garantiza derechos a su gente, es un Estado de derecha. Y nuestro gobierno es un gobierno de progreso, por lo tanto, seguiremos trabajando con fuerza para garantizar cada día más los derechos de nuestra gente”, afirmó.

Agregó que se está trabajando para “contar con un sistema político más representativo. Por eso nuestro compromiso, desde el gobierno, junto a nuestros parlamentarios, es empujar para lograr la reforma al sistema binominal”.

Subrayó que “mentiría si no les dijese que las perspectivas económicas son buenas, que este año implementaremos un presupuesto expansivo que mejorará la vida de la gente y que sería un contrasentido adoptar un pesimista discurso de crisis, justo cuando empiezan a mejorar los tiempos. No hagamos el juego a quienes se oponen al avance social, a quienes históricamente han dado la espalda al progreso y a la libertad”.