El portavoz de campaña del PP, Borja Semper, cuyo cumpleaños cae este martes 10 de enero, ha intervenido públicamente para asegurar que el proyecto encabezado por Feijóo pretende cambiar la política y "dar otro aire a la dialéctica" en este ámbito. "Por su experiencia, trayectoria y su forma de entender la sociedad, Feijóo es consciente de la pluralidad y complejidad de la sociedad a la que se dirige", remarcó el ahora portavoz de campaña de los 'populares'.
Semper lamentó el ambiente que preside la política española, donde importa mucho más quién dice una cosa, que lo que se dice y que, dependiendo de ello, "las cosas son buenas o malas". "Se ha hurtado la posibilidad de debatir sobre contenidos", ha denunciado.
También valoró que Feijóo, "con el que lleva hablando mucho tiempo", haya mantenido contactos "fuera del perímetro del PP", porque es algo que le interesa para conformar su postura política y su visión de España.
Y ha indicado que los que hace un año tenían como un referente de moderación y estabilidad a Feijóo, ahora que es presidente del PP, "le hacen un traje diferente". "Ese es el tono de la política, se trata más de desacreditar a la persona, que hablar del contenido de lo que defiende", explicó.
Asimismo, subrayó que el momento actual requiere no solo de políticos sino también de estadistas que "piensen tanto en el presente como en el medio y el largo plazo" para "proyectar una España mejor y una política más edificante". "El PP es un partido que aspira a ocupar la centralidad de la política española y gobernar para todos".
"Calmar la dialéctica política y prestigiar las instituciones"
Defiende "calmar la dialéctica política y prestigiar las instituciones" como 2 de los cimientos para construir una España mejor y que los ciudadanos no sientan que los políticos les tratan como a idiotas. "No hay que generar a los ciudadanos más problemas de los que tienen", ha indicado Semper.
Sobre los pactos del Gobierno con sus socios, advirtió de que "etiquetar a alguien de la oposición como un peligroso fascista" anula la posibilidad de que haya puntos de encuentro, mientras que acordar con aquellos que tienen un proyecto que no contribuya a la gobernabilidad no favorece la convivencia entre partidos.
Además, se mostró preocupado por la "huella económica" que va a dejar este Gobierno a las generaciones futuras y denunció que, en este año electoral, el Ejecutivo "va a tirar de chequera como si no hubiera un mañana", dependiendo de intereses electorales y no de las necesidades reales de España.
"Vamos a afrontar años difíciles en los que hace falta rigor en las cuentas y que las decisiones que se toman en materia económica estén bien pensadas, y no tengan ánimo particular con el dinero de todos", ha afirmado. Al igual que defiende una baja fiscalidad y una gestión pública eficaz.
Por último, ha confiado en que el PP no necesite a ninguna formación para poder gobernar en mayoría y espera el respaldo de los ciudadanos a un proyecto que no mira por el retrovisor, ni a derecha e izquierda, "un partido que ocupa el centro y siempre ha creído en principios que se han ido perdiendo".
Y ha considerado "extremadamente preocupante" lo sucedido en Brasil o en el Capitolio, un riesgo populista de extremistas de izquierdas o de derechas que también amenaza Europa. Abogando por "dotarnos de herramientas y reforzar el Código Penal, no por rebajar las penas a quienes quieren saltarse la Ley", subrayó, en clara alusión a la rebaja del delito de malversación o a la desaparición del de sedición, que ha realizado el Gobierno antes de terminar el año 2022.
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