El Consejo de Ministros ha aprobado este martes, a propuesta del Ministerio de Seguridad Social, una vía rápida de acceso al sistema universitario español dirigida a estudiantes extranjeros "afectados por las recientes restricciones migratorias impuestas en Estados Unidos".
"Hemos aprobado un acuerdo para la incorporación en España de los estudiantes de terceros países procedentes de Estados Unidos. Saben que siempre ha sido esa voluntad por parte de nuestro país de acoger talento y, sobre todo, de estudiantes que puedan venir fuera de nuestras fronteras", ha señalado la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, en la rueda de prensa.
La propuesta, bautizada 'EduBridge to Spain', se enmarca en la estrategia del Gobierno para reforzar el potencial de España como receptora del talento internacional.
Con este programa, los estudiantes que no puedan completar sus estudios en Estados Unidos debido a la suspensión de visados podrán hacerlo en España.
Además, con este tipo de visado, se les permitirá trabajar a tiempo parcial para combinar el empleo con su educación.
En los últimos meses, el presidente Donald Trump se ha enfrentado a varias universidades estadounidenses de alto nivel acusándolas de convertirse en "bastiones del antisemitismo" tras las protestas estudiantiles a gran escala en defensa de los derechos humanos en Palestina.
La Administración estadounidense llegó a anunciar la cancelación de todos los contratos federales con la Universidad de Harvard y la suspensión de las matriculaciones extranjeras, en una estrategia de presión contra el prestigioso centro educativo para que se plegara a sus exigencias políticas e ideológicas.
Sin embargo, la Justicia bloqueó el veto de Trump.
Un 'fast track académico' que permite estudiar y trabajar a tiempo parcial
El plan, definido como un 'fast track académico', contempla itinerarios ágiles para estudiantes internacionales en diferentes etapas educativas: bachilleres o cursos previos que pasarán a la Universidad; estudiantes que se encuentren en mitad de grado (con uno o varios cursos ya realizados); y personas que hayan finalizado el grado y que quieran realizar un máster en una universidad.
Para todos los casos, el procedimiento consistiría en la obtención de la inscripción en el centro, la solicitud de la autorización de estancia por estudios -permite tanto la residencia como la compatibilidad de trabajar a tiempo parcial por un período superior a 90 días-, la obtención del visado, el traslado a España y, por último, en su caso, la obtención de la tarjeta identidad de extranjero (TIE).
En lo que se refiere a la continuidad de los estudios en España, el Ministerio de Educación garantizará la continuidad de los estudios en niveles no universitarios en todos los cursos, así como la incorporación del alumnado a la educación postobligatoria, a través de la homologación de títulos que puedan aportar desde sus países de origen.
Además, con la finalidad de que el alumnado no sufra demoras en la continuidad de sus estudios, se emitirá una resolución provisional que autorizará a la matriculación de manera condicional hasta la resolución definitiva de su expediente.
Para todo ello, las oficinas consulares de España en EEUU agilizarán los trámites dirigidos a resolver los visados.
Las delegaciones y subdelegaciones de Gobierno y la Unidad de Grandes Empresas y Colectivos Estratégicos (UGE) harán lo propio con la tramitación de las autorizaciones correspondientes.
Además, las comisarías de Policía facilitarán las solicitudes de expedición de las TIE de los estudiantes, profesores e investigadores.
El Gobierno pondrá en marcha una campaña de información
Una vez aprobada la medida por el Consejo de Ministros, el Ejecutivo pondrá en marcha una campaña internacional de información y orientación dirigida a estudiantes interesados, que se articulará principalmente a través de embajadas y consulados, así como de la Consejería de Educación en Estados Unidos y de las diferentes universidades públicas con acuerdos con universidades estadounidenses.
El objetivo es canalizar el interés de forma ordenada, ofrecer seguridad jurídica y acompañar a los jóvenes desde el inicio de su proceso de traslado.
España ocupa el tercer lugar entre las principales opciones para los estudiantes estadounidenses que desean estudiar en el extranjero, por detrás del Reino Unido e Italia, según el sitio web 'Open Doors', y al menos 20.000 solicitan visados cada año para cursar parte de sus estudios académicos en España.
En abril, la ministra de Ciencia, Diana Morant, ya avanzó el interés de España por los estudiantes en EEUU.
Entre otras cosas, puso en valor la edición del programa Atrae 2025, que pondría el foco en la posible la salida de científicos españoles del país norteamericano.
En su tercera convocatoria, el programa contará con un presupuesto de 45 millones de euros para la contratación de líderes mundiales en sus respectivos campos de investigación, con "un foco muy especial en los investigadores que se encuentran en Estados Unidos y que están siendo despreciados por la actual Administración".