El portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, confirmó en un desayuno político en el Fórum Europa que él personalmente votaría en contra del envío de tanques a Ucrania.
En todo caso, explicó que hay que ir "mucho más allá de la pancarta” y decir un 'no' sin más mensajes. A Rufián se le preguntó por esta controversia y opinó que “una decisión tan trascendental sobre una guerra debería pasar por el Congreso de los Diputados”.
En cuanto a la posición formal de su partido, el portavoz comenzó de forma ambigua: “Somos un partido serio de gobierno, intentamos ir mucho más allá de la pancarta”. Pero acto seguido garantizó que ERC “no está a favor de ninguna muerte” y que incluso “se le podría calificar de antimilitarista”. En todo caso, volvió a insistir en que "tenemos que ir mucho más allá de la pancarta”, dejando abierto una posición de abstención o incluso de apoyo.
Rufián, en todo caso, justificó que su aseveración de trascender las proclamas simples, ejemplificadas en el concepto de pancarta, “no es fomentar ningún tipo de discurso bélico”, e incluso afirmó que no comparte “el discurso acrítico de Europa en torno a lo que decide la OTAN”. A su vez, aclaró que “eso no significa blanquear a Putin, que es un sátrapa”.
Ley del 'solo sí es sí'
En cuanto a la controvertida Ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual, conocida popularmente como del 'solo sí es sí', Rufián admitió que es "evidentemente perfectible” y señaló que “ojalá" se pudiera rectificar su texto.
Preguntado si era partidario de modificar la norma para evitar las rebajas de penas a agresores sexuales en aplicación del principio de beneficiar al reo, argumentó que la ley es “innegablemente necesaria”, pese a la “maquinaria importante" que está trabajando en su contra.
Sin embargo, reconoció que también es “evidentemente perfectible” y en esa línea lamentó que el Gobierno “no tuvo en cuenta alguna de las enmiendas” que presentaron ERC y otros grupos, los cuales, aseguró, avisaron de “algunas de las cosas que están sucediendo” con la rebaja de penas.
Al margen de esta discrepancia, denunció los ataques a la ministra de Igualdad, Irene Montero, porque consideró que se está culpabilizando "agresivamente" a los autores de una norma por la interpretación posterior de la ley. Eso, insistiendo en que el texto “es ostensiblemente perfectible” y aventuró: “Ojalá pudiéramos rectificarlo. No es la primera vez que se rectifica”.
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