Algo debe estar moviéndose en la trastienda de la política catalana. Se nota porque los partidos que podrían formar una coalición alternativa al tripartito han dejado de pelearse y se lanzan propuestas sin casi disimulo.
Las encuestas con que trabajan los fontaneros del principal partido de la oposición lo dicen claro, si las cosas no cambian de manera espectacular, PSC, ERC e ICV no revalidarían la mayoría que ahora tienen en Cataluña. Urge, por tanto buscar una alternativa. Alícia Sánchez Camacho, la líder de los populares catalanes ha enviado el primer aviso en el sentido de plantear una solución parecida a la vasca, pero adaptada a la situación catalana, es decir, sin violencia por medio.
Sánchez Camacho lo ha dicho en una entrevista concedida a la agencia paragubernamental, ACN. La senadora ha dejado claro que si CiU se deja de aventuras soberanistas y se “centra” puede contar con el apoyo del PP para armar una mayoría alternativa.
Pocas horas después los de CDC han contestado por boca de Felip Puig, práctico número 2 del partido de Mas. Lejos de las respuestas anteriores en que se planteaba casi la imposibilidad filosófica de un acuerdo, ahora se pone sobre la mesa una única condición: que el PP deje sin efecto el recurso de inconstitucionalidad que tiene puesto desde el inicio del conflicto autonómico. Esa parece ser la condición más importante porque en casi todo lo demás, los conservadores españoles y los liberales catalanes están ensayando día a día sus coincidencias en el parlamento de Madrid.
Volviendo a la oferta de Sánchez Camacho, la idea sería volver a una cierta entente similar a la alcanzada en el País Vasco. El PP ofrece apoyo desde fuera del gobierno a CiU a cambio que esta frene sus sectores más independentistas o directamente los desactive una vez que hayan servido para desarbolar a ERC.

Nace un partido para disputar el terreno a CiU y ERC
En el partido republicano las aguas bajan revueltas. El acuerdo por el que Carod-Rovira renunciaba a liderar la candidatura autonómica catalana a favor de Joan Puigcercós, lejos de tranquilizar al partido lo ha puesto en pie de guerra.
Joan Carretero, un político atípico que durante la primera legislatura ocupó la consejería de Gobernación ha decidido pasar de liderar la oposición interna a anunciar la creación de un partido alternativo a ERC.
La disidencia de Carretero movió en su día muchas adhesiones internas en un partido donde la hipercriticidad es una seña de identidad. Al ver que el acuerdo de las dos facciones mayoritarias, las de Carod y Puigcercós, dejaba sin campo de juego al 35% de disidentes aproximadamente, Carretero decidió romper las cartas. Lo hizo a través de un artículo en el diario AVUI en el que abogaba por la creación de una candidatura unitaria para las próximas elecciones autonómicas catalanas con un solo objetivo: proclamar unilateralmente la independencia de Cataluña en caso de que hubiese mayoría para ello.
Desde ERC se respondió abriendo un expediente al disidente, a lo que este respondió abandonando el partido. Una vez fuera de la organización Carretero ha seguido proclamando sus planteamientos y haciendo llamamientos a soberanistas de otros partidos, como López Tena, para crear una lista conjunta alternativa a CiU y ERC. Está por ver si este nuevo partido nacerá o si sólo tendrá como resultado una división en el mundo nacionalista catalán.
La posición de Carretero es absolutamente contraria a la reedición del tripartito y sus seguidores acentúan una posición interclasista lejana al actual posicionamiento socialdemócrata de ERC. Por lo pronto, Artur Mas, desde CiU ha abierto de par en par a Carretero las puertas de la Casa grande del catalanismo que quiere convertir en el vehículo para volver al poder que perdió a manos de Maragall.
Walesa apoya la coalición Libertas-Ciudadanos
El ex-líder sindical y premio Nobel de la paz, el polaco Lech Walesa, ha dado su apoyo expreso a la coalición Libertas, en la que se ha integrado Ciudadanos de cara a las elecciones europeas con el exdirector del ONCE Miguel Durán como candidato.
Durán fue uno de los ponentes que participaron en la convención Libertas que tuvo lugar en Roma el sábado 2 de mayoritarias con representantes de los 27 países de la Unión Europea.
Libertas es un movimiento político que defendió el no a la Constitución europea y que se sitúa en el centroderecha, mientras que Ciudadanos siempre se ha autodefinido de centroizquierda. De hecho, Durán militó en Unió, mientras que Libertas se planteó ofrecer a Alejo Vidal-Quadras liderar la lista por España.
En la convención Walesa dijo que "debemos atender al mensaje de Libertas y hacer que cuente con el apoyo de los ciudadanos". Delante del irlandés Declan Ganley, fundador y presidente de Libertas el año pasado -antes era un grupo de presión-, Walesa dijo que "Ganley y Libertas tienen el potencial para cambiar Europa y hacerla mejor. Este proyecto europeo tiene todos los ingredientes por convertirse en una fuerza histórica beneficiosa en el mundo".