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'Ley chorizo' por las malas

"Ley chorizo" por las malas

lunes 12 de julio de 2010, 01:15h
El presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, dijo este domingo que "no se va a derogar" la controvertida Ley 30, conocida popularmente como "Ley chorizo", cuya anulación reclaman desde hace diez días sindicalistas del sector bananero con protestas que han dejado dos muertos y decenas de heridos.
"La ley no se va a derogar y se interpretará tal cual indica la normativa, porque no afecta los derechos laborales y sólo les da la opción a los trabajadores, entre otros puntos, a decidir si quieren pagar cuota sindical o no", subrayó Martinelli en un boletín de prensa de la Presidencia.

El gobernante indicó que los derechos de los trabajadores como vacaciones, licencias, domingo como día de descanso se mantienen igual y no se han eliminado con la ley en alusión a las reclamaciones de trabajadores del sector bananero de la ciudad de Changuinola, en el occidente del país, de que sea derogada.

La Ley 30 tramitada como una modificación a la normativa de aviación comercial incluye cambios en tres códigos (Penal, de Justicia y Laboral) y seis leyes, incluida la orgánica de Policía, y en el ámbito laboral contempla entre otros aspectos la no obligatoriedad de la cuota sindical.

La norma, que ha sido objeto de recursos de inconstitucionalidad, también establece que se puedan suspender los contratos de los empleados en huelga, contratar trabajadores en esos casos y utilizar la Policía para garantizar la "protección" de la empresa, cuya "operatividad" queda ahora garantizada.

El gobernante reiteró que "se debe buscar el diálogo y no la confrontación, ya que muchos dirigentes han querido sembrar el caos en Changuinola y el Gobierno no lo va a permitir".

Agregó que su Gobierno continúa con el diálogo permanente para resolver la situación en esa ciudad y espera que en las próximas horas se pueda llegar a un entendimiento entre todas las partes para volver a la normalidad.

"Los problemas en Changuinola se han dado producto de la desinformación y una serie de mentiras", señaló Martinelli, después de analizar con un grupo de ministros la situación en esa ciudad occidental del país.

En el mensaje el presidente dice que los dirigentes del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (SUNTRACS), el más beligerante del país, "no tienen ni idea de lo que es la democracia en un país y quieren acabar con el Estado de derecho".

La Policía tiene orden de detención contra los dirigentes del SUNTRACS Genaro López y Saúl Mendez, así como contra otros líderes sindicales, según confirmó hoy un portavoz del Gobierno.

En los últimos tres días se han registrado en Changuinola, una ciudad de 50.000 habitantes, enfrentamientos entre huelguistas y la Policía que han dejado al menos dos muertos, decenas de heridos y más de un centenar de detenidos.

"La intransigencia de un grupo de sindicalistas no puede acabar con la industria bananera en Changuinola", dijo el mandatario, quien hizo un llamado para que se mantenga el diálogo ya que estos puestos de trabajo son necesarios en esa ciudad y representan el medio de sustento de las familias de estos trabajadores.

El presidente señaló que en varias calles de Changuinola se ha restablecido el paso, al igual que el aeropuerto, lo que significa que la normalidad está regresando a este lugar.
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