Por fin, tras el alejamiento de Baltasar Garzón y su sustitución por el juez Pablo Ruz, el Juzgado Central de Instrucción número 5 se ha puesto a trabajar en serio, al menos en lo que se refiere al controvertido 'caso Faisán', el chivatazo policial a ETA para evitar la detención de su entramado financiero.
El juez Ruz acaba de acceder a la petición de Dignidad y Justicia, que dirige Daniel Portero, para pedirle a la Juez del Tribunal de Gran Instancia de París que proceda con urgencia a remitir a España las llamadas que el supuesto etarra José Antonio Cau Aldenar realizó del 3 al 5 de mayo de 2006, fechas en las que estaba prevista la actuación policial contra el bar Faisán y que se frustró por un chivatazo policial al dueño del bar, Joseba Elosua.
Lo cierto es que la petición de esa información la realizó Garzón el pasado mes de febrero, pero rumores galos señalaban que la juez francesa no se fiaba de Garzón y estaba retrasando el envío de los documentos. Ahora, una vez cesado Garzón y sustituido por un nuevo juez, parece que los documentos vendrán pronto a España. Y, según nuestras fuentes, esos papeles van a dar muchísimas pistas sobre la autoría del chivatazo policial.
El 'caso Faisán' empieza ahora a ser investigado de verdad.
Si (
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