¿Pedirán disculpas La Verdad y La Opinión por lo que han hecho con un inocente?

El principio de que todo el mundo es inocente, hasta que se demuestra lo contrario es irrenunciable en un estado de derecho, el mismo estado de derecho que los periodistas quieren para sí y con el que se llenan la boca cuando les interesa. Lo ocurrido en estos días en Murcia con el detenido por la Policía Nacional al que acusaban de estar implicado en la agresión al consejero Cruz y los medios de comunicación, especialmente los periódicos La Verdad y La Opinión, informando de la identidad completa del arrestado, de su casa, de su familia, de su ideología, de sus actividades académicas, es un ataque a la dignidad personal del detenido y es un escalón más en el descrédito que algunos medios y actuaciones profesionales están granjeando de la sociedad para este oficio.

Tras las primeras horas de la detención, una fuente policial de la Jefatura Superior de Policía de Murcia manifestó a Murciacritica.com que se trataba de un arresto “muy en precario del que podría ser que alguien tuviera que dar explicaciones”. La misma fuente ha ido insistiendo en la absoluta falta de indicios racionales suficientes para mantener la detención y que el suceso está rodeado inconsistentes manifestaciones, incluso por parte de la víctima de la agresión, el consejero Cruz que –al parecer- a las pocas horas de ser intervenido, le pusieron delante un albun de fotos y reconoció al chaval detenido, en una foto tamaño carnét, cuya posesión por parte de la Policía debería ser explicada, pues si carece de antecedentes a cuento de qué viene a que se esté utilizando su imagen para labores de indetificación fotográfica y debe aclararse con qué garantías para el justiciable se hizo esa identificación, que el consejero confirmó. Es decir, el consejero señaló como autor de su atentado a un chico que nada tiene que ver.

Dicho y hecho, los medios, especialmente La Opinión y La Verdad. Se lanzaron a la ‘caza y captura’ facilitandos datos personales y regiversando la realidad obtienen fotos del detenido y las difunden, para que pueda ser claramente visto, también por los ‘ultras de derecha’. La Tele autonómica se fue a la puerta de la vivienda familiar, sacan el negocio familiar. La Opinión y los periódicos de Vocento sacaron también la imagen pixelada lo justo para que pudiera ser visto por los conocidos y no conocidos. Destriparon la identidad, lo pusieron al descubierto.... ¿ Y Presunción de inocencia?, contra un chico como éste no se aplica; ahora, mimar informativamente a los políticos que están imputados en los juzgados sí, eso sí. Eso lo hacen como nadie

¿Qué podríamos decir si ahora, un ultra agrediera a este joven o a sus intereses familiares? ¿quién habría colocado la diana sobre el joven?. La mañana en que el joven sería puesto a disposición judicial, en un comentario radiofónico se decía que “las brillantes esposas que llevaba puestas el detenido –describiendo una foto de La Verdad- podrían serles retiradas si en el juzgado el detenido demostraba su inocencia”. ¿Pero es que los periodistas se han vuelto locos en esta Región?; ningún detenido tiene que demostrar su inocencia, es la Policía y quien denuncia quienes tienen que demostrar la culpabilidad de un acusado, en materia penal la carga de la prueba recae sobre quien efectúa la detención y la acusación, en este caso, Pedro Alberto Cruz.

Si hubiera vergüenza en la Justicia murciana y menos compadreo en los saraos políticos; si tuvieran vergüenza en la Fiscalía debería abrirse diligencias de oficio pues aquí se ha cometido una tropelía, como es incitar al odio, criminalizar a legítimos representantes de la sociedad, tanto políticos como sindicales, empezando por el presidente Valcárcel y terminando por José Joaquín Peñarrubia en el Senado; mostraremos cómo han actuado estos señores del PP en la Región en manifestaciones contra los adversarios, gracias a las hemerotecas están retratados.

Pero, como siempre ocurre, los medios no dedicarán cinco columnas a pedir perdón al injustamente detenido, hoy en La Verdad dentro de un texto lleno de auto justificaciones piden disulpas aunque siguen llamándole ultra iaquierdista y calificativos gilipollesco, que normalemnte se emplean para decir que el malo de la película es más malo; pues como en este caso se ha visto nada tiene que ver el chico arrestado; los medios subvencionados por el Gobierno de Valcárcel quieron quedar bien con quien les paga y cuánta más sangre hacer mejor quedar ante los poderosos despilfarradores, empezando por el consejero de Cultura, de quien lamentamos la agresión y la condenamos. Los medios ni reconocerán que han manipulado la realidad para llevarla al rincón del amarillismo y del servilismo –más que evidente- a un Gobierno Regional que ha aprobado unos recortes, para bajar el déficit, empezando por los trabajadores y que deja para finales del año recortar en fundaciones, organismos autónomos, agencias, empresas públicas etc…donde se duplican funciones y existe una retahíla de pesebres que hay que poner al descubierto, pero después de las elecciones, para que las mulas o los borregos no se nos reboten. La sociedad debe saber que la Comunidad Autónoma de Murcia ha despilfarrado mucho dinero, muchísimo, una Región en la que además tenemos un transfondo de corrupción impresionante.

Por cierto, si la Policía realizara bien sus investigaciones, con eficacia y sin dilaciones, haría que la Justicia no cargara sobre las espaldas de los ciudadanos, de los justiciables, dilaciones que terminan por convertir la Justicia en un chiste malo.

En esta Región, con el silencio de algunos fiscales que deberían estar para defender el principio de legalidad antes de para llevarse ‘el gato al agua’, se ha permitido sin ninguna recriminación por su parte ni por la de los jueces, que la policía introdujera en informes conclusivos de investigaciones, acusaciones falsas que han servido para escarnio público de personas, incluso teniendo en su poder información oficial que evidenciaba la falsedad de la acusación. Frente a esos hechos, eso sí trasladándose por arte de magia los datos de los papeles policiales a los medios, cortados y manipulados por pariodistas que ya han hecho gala de cómo son capaces de dañar a una persona, por no contratar verdaderamente las informaciones. Ni jueces sustitutos ni fiscales han deducido testimonio contra los funcionarios policiales…de Hacienda hablaremos otros día. Y de todo ello se ha dado cumplida información a los medios de comunicación para que el arrastre por el fango de ‘las piezas cobradas’ fuera mayor. Por cierto cuando quiera algún sindicato policial, los jueces y fiscales –si se atreven a abrir diligencias por lo que acabo de decir- nos ponemos a mostrar ejemplos concretos…¿quiéren que lo hagamos?; eso sí, hagamos una apuesta castiza, si se demuestra se abrirán diligencias penales contra quienes hayan actuado así...¿vale?

Ahora la Policía ha tenido a un joven al que ya se le ha atribuido ‘ideología ultrarradical de izquierdas’, haciendo un seguidismo a la histeria de Ramón Luís Valcárcel. Pero, me preguntom ¿se ha cumplido exrupulosamente lo que establece la Ley de Enjuiciamiento Criminal en cuanto a la detención?

La investigación policial de la condenable agresión al consejero de Cultura parece que su hubiera ejecutado, no desde los indicios fundados, racionales y objetivos conducentes a una hipótesis de trabajo; sino que se hubiera conformado una hipótesis y el trabajo se hubiera hecho para confirmar ésta, lo que se conforma como un disparate profesional desde el punto de vista de la investigación criminal.

¿Ahora qué?