¡ESTO NO ES SERIO…..!

¡ESTO NO ES SERIO…..!
   
La última diatriba entre el ejecutivo regional y la oposición socialista, no nos parece de recibo, porque realmente no parece tener seriedad, no parece propio de personas que han asumido responsabilidades públicas.
   
La controversia aparece ahora, en que el PSOE acusa al ejecutivo regional de haber faltado a la verdad en las cuentas públicas, apuntando a un desastre de las finanzas públicas regionales,  afirmando que la Consejera de Economía no ha solicitado nada al Gobierno del Estado. Tales afirmaciones son de una gravedad extrema, dada la situación de las “arcas públicas regionales”- que son responsabilidad del gobierno del PP-. De tal manera, que o bien la consejera dimite o es cesada ipso facto, de ser cierto lo que dice Oñate; o bien es Oñate el que debería de dimitir y dejar la vida política “per secula seculorum”, si no ha dicho verdad.
   
Tal controversia a estas alturas, sobre este tema, no parece seria, y refleja la incompetencia política, o quizá la maledicencia política, a unos niveles que no son de recibo ni soportables por una sociedad inconvenientemente tensionada por la mala gestión, y la injusticia con la que se quiere arreglar.
   
Pero tampoco parece serio que un gobierno, no haya hecho bien sus previsiones económicas, como no lo es que imponga de forma unilateral y autoritariamente unas medidas injustas, haciendo pagar fundamentalmente a los empleados públicos, la mayoría economías modestas; que con el apoyo de los sindicatos y parte de la ciudadanía murciana se rebelaron contra tal injusticia y han obligado a Valcárcel a dar marcha atrás en estas medidas, aunque no plenamente. ¡Esto tampoco parece serio….!
   
De igual manera, el ejecutivo regional ha vuelto a dar un “toque fino” a su organigrama regional, disponiendo algún repliegue de la estructura administrativa regional –meramente testimonial-, y sobre todo la reducción de entes y empresas públicas, algunas de las cuales ya las había dado por extintas con anterioridad. Algo que se nos antoja escaso para un ahorro real y efectivo, que aún podría adoptar, y que no quiere abordar. ¡Esto tampoco parece serio.!
   
Tampoco parece serio, que por parte del gobierno central se tomen decisiones y se rectifiquen sobre la marcha, en función de su propio interés político inmediato, dando cabida a quien, según sus propios criterios iniciales no la tendría, como es el caso catalán.
   
Y desde luego, no nos parece serio, que la oposición regional pretenda dar lecciones de ahorro en la gestión pública, cuando el gobierno central y otros gobiernos regionales socialistas, tampoco han demostrado ser un “dechado de virtudes” en lo que a eficacia gestora se refiere.
   
¡Estos son los mimbres…!, y con ello se tratan de hacer los “cestos” que se nos pretenderá vender en la próxima campaña electoral, en la que probablemente se mienta más que se hable, como suele ser habitual, se recurra a los tópicos y slogans habituales de la derecha y la izquierda, y se agite la emotividad de la sinrazón, quizá para evitar que la razón se imponga, en cuyo caso probablemente no saldrían elegidos los mismos que han contribuido a nuestro actual estado de ruina por su contumaz incompetencia política y su proverbial mendacidad. ¡Eso sería lo serio, que se correspondería con una sociedad madura, libre y responsable…!. Aunque no es previsible.
   
Lo previsible es que la publicidad electoral, y las diatribas políticas de campaña enmarañen una realidad que no interesa ser mostrada, se apelará al simbolismo y emotividad de siempre para mover a la masa votante a que “valide” lo invalidable, y les dé un nuevo “crédito de cuatro años” a los mismos que han contribuido a este deterioro público. Aunque casualmente sean los que mayoritariamente hayan prosperado; en tanto que al día siguiente de las elecciones, pasado el “ruido electoral” nos encontraremos en la misma realidad que casi nadie quiere ver, en la que posiblemente se tendrán que tomar medidas más fuertes, por imperativo de nuestros acreedores – la banca alemana, fundamentalmente- vía UE. Pero para entonces, algunos ya tendrán el “pretendido pasaje de embarque por otros cuatro años”. ¡Esto tampoco será serio…!