Se espera recaudar unos 57.000 millones anuales
La banca europea comenzará a devolver el coste de su rescate
jueves 29 de septiembre de 2011, 09:54h
La Comisión Europea propuso este a los 27 estados de la Unión Europea (UE)
crear una tasa para gravar las transacciones financieras, que permitiría
recaudar unos 57.000 millones de euros anuales, según las primeras
estimaciones. La propuesta, pionera a nivel internacional, serviría para
penalizar la especulación financiera, así como para obtener más recaudación con
la que reducir la deuda y el déficit público.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao
Barroso, hizo pública su propuesta ante el pleno de la Eurocámara durante el
debate sobre el estado de la Unión. Barroso dio por sentado que "ha
llegado el momento de que el sector financiero devuelva la contribución a la
sociedad", tras lo que añadió que "es una cuestión de justicia",
ya que, según explicó, "si todos los sectores de nuestra economía, desde
la industria a los servicios, pagan su contribución a la sociedad, el sector
bancario debe también aportar su contribución".
La tasa se aplicaría a las compraventas de bonos y acciones
que se gravarán con un tipo del 0,1% del valor de la transacción, y a las
operaciones con productos derivados con un tipo del 0,01%. Quedan excluidas de
la tasa los préstamos a empresas, las hipotecas, los créditos al consumo, los
contratos de seguros, las transferencias y las emisiones de los bonos del
Gobierno, ya que el objetivo es que el impuesto afecte sólo a las operaciones
en que participen entidades financieras
Los diarios recuerdan que para que llegue a aplicarse la
propuesta necesitaría lograr el respaldo unánime de los gobiernos, tratándose
de una tesis similar a la que expuso en 1971 el economista y más tarde premio
Nobel James Tobin. En este sentido, se cuenta con el rechazo de entrada por
parte del Reino Unido al impuesto, mientras que desde Francia y Alemania
existiría la intención de defenderlo en el G-20.
Por otro lado, el Parlamento aprobó las seis nuevas medidas
sobre el Gobierno económico que implican una reforma del Pacto de Estabilidad y
Crecimiento y que refuerzan el papel supervisor de la Comisión, entre otros
aspectos, incluido un endurecimiento del citado pacto, que aplicará sanciones a
los países que superen los objetivos de deuda y déficit comunitarios.
El comisario europeo de Economía, Oli Rehn, dijo que se
trata de "la reforma institucional más importante en materia de política
económica" jamás hecha en la UE. En palabras del eurodiputado socialista
Antolín Sánchez Presedo, la reforma "tiene mucho de ajuste y poco de
crecimiento".
Por otro lado, el presidente de EEUU, Barack Obama, reiteró
sus críticas a los líderes de la zona euro por su incapacidad para
resolver la crisis financiera y económica. Al ser preguntado por el crecimiento
estadounidense, señaló que "en Europa no les hemos visto afrontar los
problemas de su sistema bancario y financiero con la efectividad que requerir
la situación".