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Montoro saca adelante unos presupuestos durísimos

Montoro saca adelante unos presupuestos durísimos

miércoles 25 de abril de 2012, 07:53h
El "mantra" o estribillo de "la herencia recibida" por el PP de los socialistas durará aún bastante tiempo más, según todos los indicios. Ayer fue el gran argumento para explicar los presupuestos durísimos que defiende el ministro Montoro en el Congreso, contra las enmiendas a la totalidad que plantean todos los grupos. De nuevo, volvió a debatirse la cuestión de si los socialistas conocían o no la desviación del déficit que finalmente, reveló el PP aperas llegó al Gobierno, y que le está sirviendo para su política de mayor dureza: aumento de impuestos, recortes en sanidad y educación, y sobre todo, estos presupuestos para 2012 que., de entrada, no consiguen apoyo alguno, pero que saldrán adelante por virtud de la mayoría absoluta del PP. Montoro, señala ABC, culpa a la herencia de Zapatero del Pres u0puesto más duro y austero. O en La Razón: Montoro hace responsable a Rubalcaba de la herencia recibida" Eso sí, junto a la culpa de los socialistas, hay otro culpable, que son las Comunidades Autónomas, presentadas como causante del desajuste.  "Montoro siembra más dudas con las cuentas autonómicas", cuenta El País. Relata El Mundo que Rosa Díez insiste en que no se puede seguir alimentando el caos autonómico. El Congreso de los Diputados cerrará hoy el debate sobre los Presupuestos Generales del Estado con la votación de las enmiendas a la totalidad presentadas por los partidos que, previsiblemente, serán rechazadas una vez que el PP haga valer su mayoría absoluta en la Cámara. Este miércoles culminarán los debates desarrollados, entre Gobierno y opositores, durante más de seis horas, sobre las medidas y recortes que incluyen las cuentas presentadas por el Ejecutivo el pasado 30 de marzo. Al final de sus intervenciones, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, llamó a la responsabilidad de los grupos para apoyar los Presupuestos porque son "austeros, difíciles pero también realistas", y "los que España necesita para salir de la crisis". El ministro defendió unas cuentas que "no tienen nada de amable", pero tampoco tienen alternativa, ya que la reducción del déficit para cumplir los compromisos con Bruselas es "indispensable". Por eso ha pedido la retirada de las enmiendas a la totalidad que le han presentado diez grupos políticos y ha rechazado sus argumentos, que coinciden en criticar una excesiva austeridad que podría ahogar la recuperación económica. Rubalcaba  insistió en que Montoro y el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, conocieron del gobierno anterior los datos reales -el déficit cerró en el 8,51% en lugar del 6%- con "honestidad y transparencia". El líder socialista aseguró que es el actual Ejecutivo es el que, con sus "torpezas, vacilaciones y errores", sobre todo en la elaboración de las cuentas públicas, ha aumentado la desconfianza en España.

Montoro, en cambio, aseguró que el cierre de las cuentas de 2011 "fue un engaño más, muy grave, porque ha perjudicado la imagen de España frente a sus acreedores", y ha achacado a esta desviación gran parte de la dureza de los presupuestos. Y añadió que si hay dudas sobre España y sus presupuestos "éstas conciernen a las cuentas de las corporaciones locales y de las autonomías", y ha recordado que el Gobierno "no ha creado esta situación". Pero no todo fue el debate a dos de Montoro y Rubalcaba: el portavoz de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, se quejó del trato que recibe Cataluña en los Presupuestos y recordó que se trata de la comunidad autónoma que sufre un mayor recorte de inversiones, del 45%. Dijo en catalán una expresión llamativa: Basta ya de ser cornudos y, además, pagar la bebida. Montoro, a su vez, le  respondió que Cataluña es una prioridad para el Gobierno y que España no saldrá de la crisis sin ella. Pero Duran insistióen su idea de que debería llegarse a un pacto de estado para salir de la actual "situación de emergencia", y argumentó que los Presupuestos adolecen de falta de estímulos, y tampoco las previsiones de ingresos le parecen creíbles. Y lamentó que Montoro dé por saneadas las cuentas familiares, después de que el ministro haya defendido que subir el IRPF perjudica menos a la economía porque "actúa sobre un sector, las familias, que están en situación financiera positiva". Y otras intervenciones, como la del coordinador general de IU, Cayo Lara, quien criticó que el Gobierno siga realizando recortes "que no sirven para ganar la confianza de los mercados", como lo demuestra el estado de la prima de riesgo, mientras se está perdiendo la confianza de los ciudadanos. Por su parte, la portavoz de UPyD, Rosa Díez, opinó que el Ejecutivo no tiene una estrategia clara ni posee liderazgo político, lo que le lleva, a su juicio, a no saber explicar las medidas que toma. Criticó, además, que el Gobierno demorara la presentación de las cuentas por motivos electorales, "lo que generó un grado de incertidumbre muy perjudicial para España". El diputado del PNV Pedro Azpiazu señaló que los presupuestos no mejorarán la situación económica ni sentarán las bases de la recuperación, ya que van en la dirección contraria y agravarán la crisis a corto plazo y dificultarán la salida a medio plazo... Y así, hasta diez formaciones presentaron enmiendas a la totalidad al proyecto del Gobierno. Un debate que no se limitó a debatir los grandes números. Por ejemplo, Rubalcaba se refirió a los recortes en sanidad y educación, a los que apenas se había referido Montoro porque no están incluidos en los Presupuestos, y calificó de "xenófobo" el ajuste en el Sistema Nacional de Salud, en alusión a la medida por la que se retirará la tarjeta sanitaria a unos 150.000 inmigrantes no regularizados. 

El ministro de Hacienda afeó a Rubalcaba que hable de oposición responsable mientras su número dos, Elena Valenciano, anima a gente a salir a la calle. "Usted se ha subido a la tribuna a sembrar desconfianza",  reprochó también también al líder de la oposición. Tras asegurar que España cumplirá con el objetivo de déficit y que no alcanzará las líneas rojas marcadas por Bruselas, explicó que  "no hay otro camino", y fue especialmente tajante con las Administraciones regionales, a las que avisó de que, si incumplen el déficit, el Ejecutivo no dudará en ejercer sus facultades "de prevenir, supervisar, penalizar e intervenir a las comunidades que no puedan cumplir por sí mismas los objetivos de déficit". "No se pueden producir quiebras parciales dentro del Estado, no es posible ni admisible porque de esas otras Administraciones dependen los servicios públicos esenciales". Pero ha tenido también buen cuidado en recordar que el Gobierno no cuestiona en ningún momento el Estado de las autonomías. Montoro anunció, de paso, que en la primera quincena de mayo se reunirá el Consejo de Política Fiscal y Financiera, que reúne a las autonomías y que éstas deberán presentar en ese cónclave sus planes de austeridad. "Estamos haciendo que dispongan de los recursos necesarios para llevar adelante servicios públicos básicos", explicó Montoro sobre las ayudas que se están prestando a las regiones. "Y estamos haciendo una política de anticipos y hemos aplazado las devoluciones negativas". Pero, sobre todo, ha responsabilizado a las comunidades autónomas de las futuras cifras de déficit que pueda presentar el país. "Es importante y obligado garantizar que las comunidades y Ayuntamientos van a cumplir el objetivo de déficit público", insistió.

Este miércoles, continuará el debate, y el PP tumbará las diez enmiendas a la totalidad, y los presupuestos continuarán su  tramitación...
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