Se pedía, entre cosas, la retirada de la ley de seguridad
ciudadana
El PP laminó las propuestas de resolución de la izquierda real sin leerlas siquiera
jueves 27 de febrero de 2014, 17:27h
El Partido Popular ha tumbado las 15 propuestas de
resolución presentadas por el Grupo de IU, ICV-EiA, CHA en la votación con la
que han concluido los tres días del debate sobre el estado de la Nación. Tras
las acusaciones lanzadas estos días por el PP, a través del propio presidente
del Gobierno, Mariano Rajoy, y de otros diputados de su grupo, de la supuesta
'falta de propuestas concretas', los 'populares' han laminado todas las
iniciativas de este grupo, a las que ni siquiera llegó a plantear enmienda
alguna.
Entre las propuestas planteadas por el grupo que preside
Cayo Lara se incluía la petición de retirada de la reforma de la Ley de
Seguridad Ciudadana, también la del anteproyecto de la nueva ley de
interrupción voluntaria del embarazo, la reforma de la Administración Local o
la reforma laboral, además de impedir la implantación de la Ley Orgánica para
la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE).
En relación a este último tema de la reforma educativa, la
resolución registrada reclamaba al Gobierno abrir de forma urgente un proceso
de negociación y diálogo con las administraciones y la comunidad educativa, los
interlocutores sociales y las fuerzas políticas para abordar las medidas
necesarias para mejorar el sistema educativo público.
El grupo de IU proponía impedir el cambio de titularidad, la "enajenación o
privatización del patrimonio que integra la red de centros públicos" existente,
así como establecer una moratoria a los conciertos educativos, determinar su
carácter subsidiario, equiparar su funcionamiento y las condiciones laborales
de su personal al de los centros públicos.
Junto a la solicitud de que se garantice una educación
laica, plural y culturalmente respetuosa con la diversidad lingüística de las
comunidades autónomas, IU, ICV-EUiA, CHA planteaba que se rebajen las tasas
universitarias, aumentar las becas o dignificar el trabajo del profesorado y
del personal investigador.
La resolución para responder al anteproyecto de ley del
aborto buscaba que no se atente contra los derechos fundamentales de las
mujeres y conseguir que no se modifique la legislación actual si no es para
garantizar y ampliar los derechos ya reconocidos.
En materia de derechos y libertades, junto a poner fin a la
Ley de Seguridad Ciudadana, se proponían medidas para garantizar la correcta
actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y que porten su
identificación de forma "clara y visible" para evitar objetivos
"intimidatorios" en las identificaciones y cacheos.
También se planteaba acabar con los controles basados en
"rasgos étnicos y raciales" y se solicitaba el cierre de los Centros de
Internamiento de Extranjeros (CIE), poner freno a las "devoluciones ilegales"
de inmigrantes, revisar los acuerdos de cooperación con Marruecos y elaborar
una ley integral contra las mafias de ciudadanos para su entrada en nuestro
país.
Otra de las resoluciones planteaba la reprobación de Rajoy y
de todo su Gobierno "por situar a España en un retroceso económico y social y
una involución democrática sin precedentes". IU, ICV-EUiA, CHA basó esta propuesta en la gestión que el
Ejecutivo del PP hace de la salida de la crisis económica, las reformas en
educación, su agenda de "privatizaciones y restricciones de derechos", la
"criminalización y represión de la movilización ciudadana" y los casos de
corrupción que afectan a altos dirigentes 'populares', con el 'caso Bárcenas' a
la cabeza.
Las propuestas se completaban con iniciativas para impulsar
la Memoria Histórica, la rebaja del IVA cultural o con una serie de apartados
específicos de lucha contra la pobreza. Así, se proponía establecer una renta
básica de ciudadanía, que se tengan en cuenta las reivindicaciones de la
Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y se establezca la dación en
pago.
En una resolución específica se insistía en la derogación del
artículo 135 de la Constitución que prioriza el pago de la deuda frente a los
servicios públicos y los derechos sociales. También incrementar de forma
gradual el salario mínimo hasta que represente al menos el 60%, llegando hasta
los 1.100 euros en octubre de 2015.
También es conocida la propuesta de reforma fiscal para
hacerla más progresiva y justa, acabando con la "maraña" de deducciones,
bonificaciones y exenciones actuales e implantando una lucha contra el fraude
fiscal más afectiva.