Tras el anuncio de la solidaridad vallecana, a través no sólo del equipo -su entrenador
Paco Jémez, jugadores y directivos- a tope con
Carmen Martínez, la mujer de 85 años y vecina del barrio desahuciada de su vivienda habitual desde hacía más de medio siglo. Porque, a lo largo de esta semana se van a concretar una serie de medidas efectivas que van más allá de las declaraciones.
Como ya anunció Jémez, el míster va a firmar y asumir el contrato del nuevo hogar que escoja
Carmen en sustitución del que consideraba "suyo", algo que, incluso con la ayuda de varios jugadores y empleados del Rayo que viven en el barrio, puede ocurrir dentro de pocos días o incluso esta semana. También se ha involucrado en el apoyo económico la plantilla, el consejo y los empelados.
Y todos lo hacen no sólo para el tema de la vivienda, sino también para la alimentación de Carmen, siempre muy agradecida,como ha declarado -"Les doy mil gracias y que Dios se lo pague"-, desde ya y en el futuro. También habrá, por parte del club de manera oficial, otras iniciativas que se están estudiando, igualmente con el apoyo de las Peñas rayistas, la más porbable la de crear una fila cero en los partidos que disputen en su estadio.
No es de extrañar que, destaque el agradecimiento expresado ya en multitud de declaraciones a distintos medios por parte de Carmen, recordando su participación en las fiestas del barrio y en otras cosas. Y que pueden resumirse en dos de sus frases definitivas y definitorias: "Si lo viera -en referencia a Paco- le daría cuarenta besos", y, claro: "Que viva el Rayo Vallecano".