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Una cosa es paz y otra pasividad

Una cosa es paz y otra pasividad

viernes 14 de diciembre de 2007, 23:26h
Diciembre de adormecimientos y aturdimientos…  De quemar nuestras últimas reservas como ricachos petroleros comiéndonos el saldito y haciéndonos los locos con lo que nos traerá irreversiblemente el nuevo año…

Con una inflación que se come cualquier ahorro, estamos los venezolanos en las calles y en los centros comerciales, dedicados de lleno a comprar que es el verdadero deporte nacional… Comprar y comprar para quemar pocos o muchos bolívares que una economía insana convierte en nada… Sin salir aún, el cacareado “Bolívar Fuerte” ya ha perdido, según los expertos,   20% de su valor durante el período de transición que estableció el Banco Central de Venezuela, y un economista tan serio como Gustavo García lo califica de  “bolívar flojo”, porque justo en los tres meses de introducción de la reconversión monetaria, se ha producido una aceleración de la inflación y una presión cambiaria brutal en el mercado paralelo…

Pero qué importa, si es que este comunismo petrolero de Chávez permite mantenernos aturdidos mientras él termina de destruirnos totalmente el país. Aquí llegan los brasileros, en verdadera avanzada de ávidos depredadores, encabezados por un Lula Da Silva que inspira un asco profundo con su pragmatismo amoral, que despliega sin rubor entre burdos halagos al militarote, chistes malos y cálculos rápidos frente al arca abierta…

El bolívar flojo es parte del caos económico que ya está aquí pero que será tragedia dentro de muy poco… Una inflación que el pasado noviembre fue de 4,4%, la tasa más elevada que se haya registrado sin que hubiera un ajuste cambiario ni una maxidevaluación, y un aumento de precios que sólo en un mes, es el aumento de la inflación anual de muchos países latinoamericanos, pero que aturdidos como estamos, no pareciéramos percibir y mucho menos tomar posiciones frente a lo que será el año 2008…  Despedimos este año, haciendo práctica del grito emblemático del venezolano ¡Ta’barato dame dos! Y es hasta razonable ya que una inflación superior a 20% y unos desequilibrios económicos terribles convierten nuestra economía en sal y agua…

Una  escasez de alimentos total que se asume como normal y nos acostumbramos a ella es sólo el inicio. La errática política cambiaria del sociolisto Hugo, destructor de Venezuela y hacedor de una mafia roja millonaria donde su propia familia de pobres de solemnidad ha pasado a ser miembro de número del poder económico bananero, reseñada en revistas mundiales sin que esto les cause malestar alguno.  Esta política imposible de seguir sosteniendo ya que día a día se aleja más el precio del dólar oficial  del dólar permuta, un país cuyas importaciones se tragan cualquier renta petrolera y donde los vivarachos del mundo llegan a por su parte del botín, bajo el convite traidor de un militar grotesco que con Venezuela entera se paga su ambición de poder y eternidad, no puede sino mostrar ese comportamiento en su gente…

Este caos es perfecto para los brasileros, eternos garimpeiros, ladrones de nuestra riqueza y ahora bienvenidas sus ambiciones y mañas a cambio del apoyo y las loas al dictadorciño…  Ayer escuchábamos al pícaro Lula decir descarado… que el desequilibrio de nuestra balanza es normal, pues "sólo cuando Venezuela se fortalezca se equilibrará"… y que aquí están ellos los eternos garimpeiros para  equilibrarnos… Llegan a por los millones que destinábamos a los acuerdos comerciales con Colombia, que por capricho del excelso militarote se suspenden hasta que Uribe deje la presidencia del vecino país… Contemplamos esa rebatiña, aún perplejos ante la falta de reacción de ese liderazgo opositor que se siente crecido por los resultados del 2 de diciembre, que por los vientos que soplan, serán en la práctica absolutamente inútiles para frenar esta horda letal que nos destruye Venezuela.

Las detenciones de unos pillos gobierneros que en Miami ejercían como “Agentes” del avance de la robolución, el cinismo total de la recién estrenada presidenta argentina, embarrada hasta su teñida cabellera por toda la porquería que está quedando al desnudo y que nos la muestran como la destinataria de buena parte de los dólares viajeros que Hugo Chequera consigna para sus incondicionales… La arrogante Cristina simplemente llama “Basura” a todo lo que está desnudándose y mostrando la magnitud exacta de la podredumbre regional… La vivaracha Cristina  coreando ya la manoseada cantaleta de los planes desestabilizadores del imperio contra los salvadores de América Latina y un Chávez ocupado en seguirnos desplumando y arruinando…

Diciembre de adormecimientos y aturdimientos…  De quemar nuestras últimas reservas como ricachos petroleros comiéndonos el saldito y haciéndonos los locos con lo que nos traerá irreversiblemente el nuevo año… Pasividad y conformismo, muy diferente a lo que sería paz y esperanzas ciertas

Eleonora Bruzual
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