El último partido de la jornada de ayer lunes en el Mundial de Qatar tuvo una sorpresa muy positiva, pese a que no es bueno que los espontáneos estén saliendo a los terrenos de juego por motivos de seguridad.
Un italiano de 35 años salió al campo corriendo con una bandera arcoiris, que en realidad no era exactamente la que representa al colectivo LGTBI, sino que en su país es utilizada como símbolo de la paz (de hecho se podía leer la palabra "Paz" en ella).
En todo caso, este jugador de fútbol de categorías modestas, se llevó la ovación y aplausos de gran parte de los espectadores del Portugal-Uruguay por llevar estos colores, que han sido vetados por la organización de la Mundial por la censura al colectivo LGTBI.
La FIFA ha sido partícipe de esta petición qatarí e informó a todas las selecciones participantes que no podrían llevar símbolos que representasen a este colectivo y que los famosos brazaletes de capitán, que en muchos países es arcoiris para representar la diversidad, tampoco podrían ser de ese diseño.
El hombre que se lanzó al campo con esta bandera llevaba también una camiseta con mensaje: era una elástica con el diseño de Supermán pero ponía "Save Ukraine", en referencia a salvar y apoyar a Ucrania en la guerra con Rusia. Además, incuía otro lema más: "Respect for Iranian woman", en apoyo a las mujeres iraníes tras la crisis de los velos, que están suponiendo importantes revueltas en ese país por los derechos y libertades de las mujeres.
Este hombre, según informó la prensa italiana, es Mario Ferri, habitual en este tipo de saltos al campo para hacer reivindicaciones sociales. De hecho, ya saltó al campo en el Mundial de Brasil de 2014 con una camiseta con el mensaje "Salven a los niños de las favelas". Es futbolista y jugó en el club Tre Fiori del pequeño país de San Marino, vinculado históricamente a Italia.
Así se comentó en redes:
Si (
No(_66335bb799879.jpg "El Dortmund da la sorpresa y golpea primero en la semifinal (1-0): el PSG y Mbappé se la juegan en casa")
A favor (
En contra (
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