El Real Madrid ha agrandado su leyenda en Abu Dabi con el 7º título de campeón del mundo. A los Mundiales de Clubes ganados en 2014, 2016, 2017 y 2018 se suman las Copas Intercontinentales de 1960, 1998 y 2002. De esta manera lidera el palmarés por delante de los 4 campeonatos del Milán y los 3 del Peñarol, Boca Juniors, Barcelona, Inter de Milán, Nacional, Bayern de Múnich y Sao Paulo.
La victoria 4-1 ante el Al Ain fue fácil, pero trabajada y con seriedad, y permite al Madrid tener un palmarés con 28 títulos internacionales: 13 Champions League, 7 Mundiales de Clubes, 4 Supercopas de Europa, 2 Copas de la UEFA y 2 Copas Latinas.
Solari compareció ante los medios de comunicación y mostró su satisfacción por su primer título como entrenador del Real Madrid: “Estar aquí es gracias a los jugadores y haber ganado este título también. Este título pone el broche de oro a una etapa maravillosa que intentaremos continuar. Ganar 3 Champions y 3 Mundiales de Clubes será difícil de repetir. Este grupo de jugadores y este club han hecho historia”. Además, el argentino tuvo estilo al dedicar parte del título a Zidane, anterior entrenador, ya que sin su trabajo y sus logros, dijo, no podrían haber estado estos días en Abu Dabi.
Por su parte, Marcos Llorente fue elegido mejor jugador de la final del Mundial. El centrocampista, que disputó 82 minutos, marcó el segundo gol del Madrid con una gran volea desde fuera del área. Concluido el encuentro, el canterano dijo: “Estoy muy contento por el gol porque es el primero con el Real Madrid y a este nivel, y qué mejor que en esta final”. Llorente ha pasado de no contar para Zidane y Lopetegui a ser clave tras la lesión de Casemiro y tener ya asegurado un hueco en la plantilla. Ni él quiere irse ni se le va a ceder o traspasar en el mercado de invierno.
Además, Gareth Bale recibió el Balón de Oro del Mundial tras su hat-trick en la semifinal ante el Kashima Antlers. Contra el Al Ain estuvo cerca de marcar un golazo de chilena. El jugador del Al Ain Caio logró el Balón de Plata, mientras que Santos Borré, de River Plate, se llevó el Balón de Bronce.
Tras la ceremonia de entrega del trofeo, en la que el presidente Florentino Pérez saludó a los jugadores y los miembros del cuerpo técnico, llegó la explosión de felicidad cuando el capitán Sergio Ramos levantó el Mundial de Clubes. Los campeones dieron la vuelta al campo para agradecer el apoyo de la afición y posaron debajo de una de las porterías, dejando imágenes para el recuerdo como el momento en el que Marcelo cortó un trozo de la red. Sin embargo, Isco no participó, como otros jugadores. Al malagueño, que no jugó ni un minuto, se le ve más fuera que dentro. Por delante de él jugaron Dani Ceballos y Vinicius, impensable hace unos meses...
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