Los combustibles siguen subiendo tras el fin de la bonificación del Gobierno

Con 2022 acabó la bonificación a los combustibles, una ayuda de 20 céntimos por litro que el Gobierno llevaba ejecutando desde el pasado mes de abril como respuesta al encarecimiento tras la guerra en Ucrania.

Finalmente el Ejecutivo decidió que en 2023 esta ayuda solo se mantendría a ciertos sectores como los transportistas o agricultores, por lo que para el resto de particulares los precios serán más elevados.

Como era de esperar los bolsillos lo han notado, pero es que desde el día 1 los precios de los combustibles no han dejado de subir y se vuelven a encarecer por segunda semana consecutiva.

Llenar un depósito llega ya a los 90 euros

Según los datos del Boletín Petrolero de la UE, la gasolina es ahora un 17% más cara que con la bonificación y el precio del diésel un 15%.

Con las cifras del boletín, que recoge el precio medio de más de 11.000 gasolineras españolas, en estas últimas semanas el precio ha subido alrededor de 22 céntimos por litro con el fin de la bonificación.

Sin tener en cuenta los descuentos, la subida ha sido de 0,032 céntimos por cada litro esta semana y en el caso de la gasolina su precio es de 1,61 por litro, lo que implica una subida del 1,98%.

En el caso del diésel el incremento por litro de esta semana es de 0,021 céntimos y se paga ahora a 1,68 euros, lo que le encarece un 1,25% respecto a los precios de la semana anterior.

El precio de la gasolina es el más alto desde la semana del 1 agosto, a las puertas del principal periodo vacacional del verano, cuando se comercializaba a 1,7 euros.

En el caso del diésel no estaba tan alto desde mitad de noviembre, cuando el precio por litro era de 1,74 euros

Con los precios de ahora, llenar un depósito de unos 55 litros cuesta 89 euros para los de gasolina y hasta 92,5 euros para los vehículos diésel. Pero cabe destacar que pese a la subida, España sigue gozando de unos precios en los combustibles más bajos que en el resto de Europa.