La inversión de la curva de rendimientos de los bonos del Tesoro de EEUU entre dos años y 10 años se profundizó el viernes a -70 pb ante la preocupación por una inminente recesión, acercándose a niveles vistos por última vez en el año 2000.
Los sorprendentes datos de las ventas minoristas del pasado miércoles aumentaron las expectativas de que el banco central estadounidense siga endureciendo su política monetaria, incluso después de que las cifras de los precios al consumidor y al productor, más débiles de lo esperado, hicieran pensar que las subidas de tipos podrían estar llegando a su fin, lo que provocó una fuerte caída de los rendimientos.
El viernes, la presidenta de la Fed de Boston dijo que el banco central tiene por delante más subidas de tipos, al tiempo que añadió que espera que la trayectoria probable de la política monetaria no perjudique demasiado a la economía estadounidense. Un día antes, su homólogo de la Fed de San Luis declaraba que el objetivo de la política monetaria de la Fed tiene que subir al menos a un rango de entre 5,00% y 5,25% desde el nivel actual de entre 3,75% a 4,00% para ser "suficientemente restrictivo" para frenar la inflación.
Se espera que la Reserva Federal suba los tipos 50 pb en su reunión del 13 y 14 de diciembre. Sin embargo, la magnitud de la subida podría verse influida por los datos de los precios al consumidor de noviembre, que se publicarán el 13 de diciembre.
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