En otra escalada de su reorganización de la política comercial, la semana comenzaba ayer con el anuncio del presidente estadounidense de la imposición de nuevos aranceles del 25% a todas las importaciones de acero y aluminio en Estados Unidos. La UE señaló que podría tomar represalias y el presidente estadounidense prometió más anuncios esta semana. El origen del mayor volumen de importación de acero estadounidense son Brasil, Canadá y México, seguidos de Corea del Sur y Vietnam, según datos del Gobierno. En cuanto al aluminio, Canadá, representó el 79% de las importaciones estadounidenses de este metal en los primeros 11 meses de 2024.
Además de los nuevos aranceles, el domingo el presidente estadounidense hizo comentarios directamente relacionados con el mercado de bonos. Dijo que su gobierno podría investigar los pagos de deuda del Tesoro en busca de evidencia de posible fraude y sugirió que la carga de deuda estadounidense de 36 billones de dólares podría no ser tan alta.
Sin que el mercado haya descifrado lo que realmente quiso decir el presidente, si se refería al servicio de la deuda o a otros pagos gubernamentales realizados por el Departamento del Tesoro, lo cierto es que sus palabras hacían que ayer los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense cayesen y que la demanda para las subastas de bonos de esta semana se haga más difícil. Mientras, además de nuevas declaraciones de Trump, el mercado estará atento hoy a la presentación del informe semestral de política monetaria del presidente de la Reserva Federal ante el Comité de Presupuesto del Senado y al Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes mañana.