www.diariocritico.com
Encuentro de lutieres en Pelayos de la Presa para la reproducción de instrumentos musicales representados en el pórtico norte de la Colegiata de Toro
Encuentro de lutieres en Pelayos de la Presa para la reproducción de instrumentos musicales representados en el pórtico norte de la Colegiata de Toro (Foto: Diego Sánchez)

Alquimia musical medieval en Pelayos de la Presa

lunes 08 de agosto de 2016, 19:05h
Seis lutieres trabajan a destajo desde este domingo y hasta el 13 de agosto en Pelayos de la Presa para trasladar a la madera cinco de los quince instrumentos musicales representados en el pórtico norte de la Colegiata de Toro (provincia de Zamora), cuyos íntimos detalles fueron desvelados en la última restauración del inmueble, realizada hace cuatro años.

Se trata casi de un ejercicio de alquimia artesana que transforma la piedra en madera. Es un trabajo de arqueología musical en toda regla, pues estos especialistas deben 'oír' en la madera el color de la música de cada uno de los instrumentos (una viola oval, un organistrum, una viola lobulada, una cítola y un salterio 'de cisne') para que se adecúe a su esencia original. Es decir, tal y como la parecibían los autores originales de estos relieves en la Colegiata.

Instrumentos extraños y poco vistos que se espera sean presentados en la localidad zamorana y que protagonicen un concierto en el que músicos especialistas puedan sacarles todo su sonido. Tal y como adelantó Madridiario, los alquimistas de esta aventura sin financiación institucional que tratan de descifrar este enigma del pasado son: Jesús Reolid (promotor de la idea), Carlos Paniagua, Carlos do Viso, Demian Reolid, Mario Unsain y Olivier Feráud (que ha tenido que abandonar el cónclave a última hora).

La iniciativa parte de una profunda investigación, en la que han tenido que dirimir qué maderas (tilo y abedul), herramientas, ceras y aceites eran los adecuados para sus obras. Además, han realizado un extenso trabajo de documentación a través de esculturas e iconografías de manuscritos medievales para reproducir estos instrumentos de los que apenas quedan vestigios. Han invertido semanas estudiando proporciones y elaborando planos. De hecho, este mismo lunes, en la presentación a los medios de comunicación, se ha conocido que en un debate entre estos expertos, han decidido que uno de los instrumentos no podía ser un rabel, sino una viola lobulada, cuya construcción diverge en la posición del clavijero. De otra forma, se hubiese dado por bueno el adelanto en varios años de la invención del rabel, algo que no se podía demostrar documentalmente.

Ahora ha comenzado una semana de jornadas extenuantes para 'despertar' vestigios musicales que han estado dormidos en la piedra durante 800 años. "Me gustaría que fuera un homenaje no sólo a los canteros que tallaron estos instrumentos, sino también a los constructores de los instrumentos que tallaron los canteros", ha sentenciado Reolid.

Más información e imágenes en Madridiario

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios