www.diariocritico.com
Portadas de discos de Lana del Rey
Ampliar
Portadas de discos de Lana del Rey

Los 5 mejores discos de Lana del Rey

jueves 01 de febrero de 2024, 16:13h

Lana del Rey acaba de anunciar que este 2024 verá la publicación del décimo disco de su carrera (el undécimo, si contamos 'Violet Bent Backwards over the Grass'). El disco se publicará en septiembre, se llamará 'Lasso' y estará más orientado hacia el country. Así que desde Diariocrítico hemos querido utilizar semejante ocasión para repasar nuestros 5 discos favoritos de una de las artistas que ha perfilado el pop en el Siglo XXI:

1. Norman Fucking Rockwell! (2019)

Lizzy Grant destroza la cuarta pared entre Lana del Rey, el personaje, y ella misma y entrega el siguiente gran disco americano, algo de cuyo potencial ya se podía ver desde que lanzara 'Video Games'. Se puede considerar este disco como su carta de amor a California y Los Ángeles, destilando lo mejor de su esencia, con ecos de las mujeres de Laurel Canyon, los Beach Boys o Neil Young, mitos de una tierra de la que neoyorquina se ha convertido en otra clara referencia. Aquí están algunas de las mejores canciones de su carrera como 'Venice Bitch', 'Mariners Apartment Complex', 'The Greatest', 'Hope Is a Dangerous Thing for a Woman Like Me to Have – but I Have It' o ese 'Norman Fucking Rockwell' que comenzaba el disco con una de sus frases más demoledoras "Dios mío, cariño, me follaste tan bien que casi te dije "te quiero". A la primera escucha me pareció que era demasiado largo, a la segunda que no encajaba la versión de Sublime, a la tercera ya estaba convencido que, como a los grandes discos, no le sobraba ni una coma, desde entonces no ha hecho sino mejorar. Un disco imprescindible del Siglo XXI.

2. Ultraviolence (2014)

'Ultraviolence' era un disco oscuro, en blanco y negro, con el que Lana redoblaba la apuesta por su personaje, con la ayuda de Dan Auerbach de los Black Keys en la producción, dándole un punto amenazante, e incluso blues, a las baladas de Lana. Aquí se volvía a presentar la princesa de la Costa Oeste Americana, un personaje desvalido y 'vintage', siempre en los brazos de un hombre problemático. El disco tenía una increíble primera cara en la que sobresalía la maravillosa 'West Coast', donde una sinuosa guitarra daba paso a un tema que se ralentizaba en su acertado estribillo, algo que rompía las reglas no escritas del 'mainstream'. Si el disco no alcanzaba la categoría de obra maestra era porque la segunda cara no llegaba al increíble nivel de la primera, donde se encontraban maravillas como 'Shades of Cool', 'Brooklyn Baby' o la canción titular. Por si fuera poco, en canciones como la controvertida '"Fucked My Way Up to the Top' se reía de la imagen que tenía la prensa sobre ella. La artista demostraba con este 'Ultraviolence' ser mucho más que el producto plano y vacío del que hablaban sus detractores.

3. Born To Die (2012)

El disco que creó el mito, una de las obras más influyentes de las últimas décadas, en su momento fue masacrado por una crítica que no se creía al personaje y que pensaba que todo era una operación de marketing, pero este es uno de esos discos que cambiaron el rumbo de la industria y permitieron la aparición de Lorde, Billie Eilish, Clairo y hasta la parte más cantautora de Taylor Swift. La propia protagonista lo bautizó como "Hollywood Sadcore, Summertime Sadness Dope". Y utilizaba su propia imagen a medio camino entre los 'girl group' de los 60, Amy Winehouse y una diva sacada de una antigua película de la edad de oro de Hollywood para cantar unas canciones llenas de lujosas producciones de cuerdas y ambientes cinematográficos, con percusiones sacadas del hip hop, es a lo que se refería la propia cantante cuando hablaba de la Nancy Sinatra 'gangsta', sin olvidarse mencionar que ella era también su propio Lee Hazlewood. Detrás de la máscara, no se sabía si irónica o sarcástica, había una voz susurrante que entonaba con convicción absoluta cosas como "they say that the world was built for two/Only worth living if somebody is loving you". Es un disco al que le puede sobrar alguna canción pero que en sus mejores momentos, como 'Video Games', 'Blue Jeans', 'National Anthem', 'Summertime Sadness' o la canción titular, se encuentra entre lo mejor de su carrera, una especie de traducción musical de un antigua melodrama dirigido por Douglas Sirk (o Todd Haynes) con los colores saturados y las emociones a flor de piel.

4. Did you know that there's a tunnel under Ocean Blvd (2023)

'Did you know that there's a tunnel under Ocean Blvd' es un disco al que se le puede calificar como muchas cosas, largo, indulgente, irregular y fascinante, un trabajo que lleva el sello distintivo de Lana del Rey, el de una compositora con un mundo propio en el que las baladas de piano siguen siendo la regla, pero a las que les sigue añadiendo cosas, los conocidos toques de hip hop, un poco de trap y en este caso también toques de góspel. No es la obra maestra que fue 'Norman Fucking Rockwell!' pero es un disco notable de un artista que es una de las mejores compositoras de su generación. Y se cierra con ese glorioso final en el que rehace una de sus grandes canciones 'Venice Beach', se trata de 'Taco Truck vs VB', la canción más atrevida del disco, en la que suelta esto para todos sus críticos: "Before you talk let me stop what you say/I know, I know, I know that you hate me". Ya había llegado a un momento en el que a Lana del Rey le importa todo un pimiento, las críticas, las ventas y casi todo lo demás. Ahora solo importa su legado y este sigue solidificándose con cada nuevo disco. >>Lea la crítica completa

5. Chemtrails over the Country Club (2021)

'Chemtrails Over The Country Club' fue un disco continuista con respecto del disco que le precedía, el colosal 'Norman Fucking Rockwell!', aunque quizás algo más folk e intimista, un poco más Joni Mitchell y menos Carole King, dos referentes claros para esta dama de Venice Beach que suspira por Laurel Canyon. Una obra que no tiene ninguna canción a la altura de las mejores de su carrera como 'Video Games', 'Venice Beach', 'West Coast' o 'A&W' pero que encaja como un guante en su particular universo sonoro, exuberante, barroco, melancólico y un punto decadente. Un trabajo muy sólido.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios