Diosa Canales dejó la pena de lado pero aún se ruboriza

¿Eres una mujer de cuántos CC?

“Antes tenía 500 pero me los quitaron porque me dañaban la columna. Luego sufrí un accidente y pedí que los retocaran. Sólo me he operado los senos, aunque ahí ya tengo cuatro intervenciones. Actualmente luzco 400 cc”.

¿Son tu boleto al estrellato?

“Entrar al mundo de la farándula es muy difícil. Hay que tener talento, personalidad y suerte. Un buen físico no lo es todo pero te agrega puntos adicionales. La perseverancia es lo más importante”.
¿Cuál es el precio de la fama?

“Es muy alto y lo estoy pagando. Son chismes, mentiras, escándalos y acosos de la prensa”.

¿Qué serías capaz de hacer para conseguirla?

“Nada loco… sólo trabajar”.

Pero durante tus presentaciones te gusta hacer topless…

“Sí. La adrenalina que siento con el público es muy grande y me dejo llevar. Muy joven descubrí que esa sensación me daba confianza. Me gusta sentirme admirada de otras formas”.

¿Siempre fuiste atrevida?

“No. Cuando empecé a bailar sentía pena”.

En cápsulas

¿Qué te ruboriza?

“Que me hagan cosquillas. A veces cuando estoy en un set de TV me pongo muy nerviosa y roja”.

¿Cambiarías otro aspecto de tu cuerpo?

“No. estoy satisfecha”.
 

¿Tu familia te apoya en esto de ser la bomba sexy?

“Al principio fue difícil. Mis padres siempre me apoyaron, pero algunos tíos repudiaban mi incursión en la farándula y criticaron mi sensualidad porque son muy religiosos”.