Nadal, inasequible al desaliento, pese a las derrotas: "Estoy en el camino correcto"

Nada fue como se esperaba en el torneo de Doha, primero del año, que ansiaba una lucha por el título entre el español y el suizo, tres veces campeón. Primero Federer abandonó y después, Nadal tampoco cumplió las expectativas. El balear encajó su primer revés oficial del curso y ahora ya piensa en el Abierto de Australia, que comienza el día 16. "No hubo suerte hoy, Monfils jugó mejor. Ahora a preparar mi viaje a Melbourne, donde seguiré con la puesta a punto", comentó el balear en Twitter.

El español aún está en rodaje. Perfila aún tanto su situación física como la aclimatación a ciertas variantes en su juego, que incluyen el cambio de raqueta. El tenista balear, finalista en 2010, cuando perdió con Davydenko, no pudo frenar el buen tenis de Monfils, especialmente en el primer set. De los nueve enfrentamientos previos, Nadal sólo había perdido uno. Fue también en Doha, en los cuartos de final de la edición de 2009.

Nadal dispuso de oportunidades en la segunda manga. Tras romper en el segundo juego el saque del galo por primera vez, llegó a tener una ventaja de 4-1. Monfils, que ya fue finalista en 2006, reaccionó. Logró un parcial de 5-0 para dar la vuelta a la situación y cerrar el partido. Habrá final francesa en Doha por primera vez en la historia del torneo. Monfils se medirá a Jo Wilfried Tsonga, que no tuvo que jugar para situarse como candidato al título.

"No creo que hiciera un mal partido. En el segundo set comencé a hacer bien las cosas. Hice lo que tengo que hacer para ganar un partido contra Monfils", aseguró Nadal tras el partido. Sin embargo, admitió que en el tramo final no estuvo a un gran nivel. "No jugué muy bien al final del partido. Tuve también un poco de mala suerte en algunos puntos decisivos. No acerté en algunos movimientos del final. Él fue mejor que yo y le felicito", explicó.

De todos modos, Nadal reconoció que afronta el Abierto de Australia "muy feliz" por su actuación en Qatar. "Creo que jugué un gran torneo, jugué más agresivo de lo normal, incluso aunque no sea quizás lo correcto. Necesitaba ser un poco más consistente, pero estoy haciendo las cosas que tengo que hacer para competir con los mejores del mundo", afirmó. Nadal cree que el cambio de raqueta le ayuda "a golpear la pelota más largo en el servicio". "Tengo que continuar trabajando como ahora y creo que es el camino correcto para ganar en el futuro", sentenció.