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Rajoy, eufórico por todo lo bien hecho durante su mandato

El presidente del Gobierno advierte de que empleará la ley contra las elecciones 'plebiscitarias' catalanas

El presidente del Gobierno advierte de que empleará la ley contra las elecciones 'plebiscitarias' catalanas

> Lanzado a la campaña electoral, prometió rebajas de impuestos no solo en 2015: también en 2016> No citó a Podemos,  pero repitió doce veces en lo que "no podemos" caer, ni "podemos" hacer.> Tampoco habló de las elecciones griegas, y apenas del posible adelanto en Andalucía del que ha dicho que responde a intereses "personales"

domingo 25 de enero de 2015, 12:37h
Un Mariano Rajoy más satisfecho que nunca por la labor realizada durante estos tres años clausuraba este domingo la convención del PP anunciando que combatirá legalmente las elecciones 'plebiscitarias' catalanas y lanzándose desde ahora a un programa de ofertas electorales, incluyendo la bajada de impuestos no solo en 2015, sino también en 2016. No citó a Luis Bárcenas, cuya sombra ha sobrevolado todo el tiempo esta 'cumbre popular', pero habló de un firme combate contra la corrupción, reconociendo que se han dado conductas irregulares en algunos cargos públicos del PP. No citó a Podemos, pero repitió hasta doce veces que "no podemos" ni tirar por la borda lo ya logrado, ni 'podemos' asomarnos al precipicio, ni 'podemos'...
Durante casi una hora de discurso, el presidente del Gobierno y del PP tampoco citó, por cierto, a su antecesor, José María Aznar, que había inaugurado la convención también sin mencionar ni a Rajoy ni todos los logros económicos que el presidente fue desgranando para felicidad del más del millar de personas que llenaban el palacio de congresos de Madrid.  Pero lo cierto es que, al margen de estas consideraciones personales, hay que subrayar que el clima en el que se desarrolló este cónclave del partido gobernante durante tres días, rematado con unos vídeos especialmente vibrantes y emotivos,  fue de cierre de filas ante unas elecciones que se producirán dentro de cuatro meses...al margen de lo que suceda en Andalucía, donde todo indica que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, convocará este lunes elecciones autonómicas anticipadas, una eventualidad que, por cierto, tampoco quiso mencionar el inquilino de La Moncloa.
 Así, Rajoy, en un discurso en el que confirmó que la economía es para él lo más importante y que no hay el menor ánimo autocrítico en sus planteamientos, dejó sin tratar los dos temas que acaso van a acaparar los titulares de esta semana: el resultado de las elecciones griegas -las obvió, simplemente-y las muy probable elecciones andaluzas de marzo. Allí, estaba, con la 'plana mayor' de los 'populares', el jefe del PP andaluz, Juan Manuel Moreno, que no se cansó de repetir ante los micrófonos -más de un centenar de periodistas acreditados-lo contrario de lo que la presidenta andaluza ha venido diciendo estos días, en los que ha negado que vaya a presentarse a las primarias socialistas: que Susana Díaz convoca elecciones anticipadas para competir con Pedro Sánchez por el liderazgo del PSOE.

Las elecciones catalanas "no serán un camino hacia la fractura de España"

El presidente del Gobierno ha garantizado que las elecciones convocadas en Cataluña el próximo 27 de septiembre "no pueden ser ni serán un camino hacia la fractura de España", al tiempo que ha criticado la convocatoria de esos comicios al igual que el posible adelanto electoral en Andalucía responde "a razones puramente partidistas, al interés propio y no al interés general de los ciudadanos". Además, ha reiterado que las elecciones catalanas tendrán el mismo carácter de siempre y no serán plebiscitarias, y ha señalado que "después del simulacro del referéndum, ahora quieren el simulacro de unas plebiscitarias".



Rajoy ha advertido de que si alguien cree que "con un subterfugio tan burdo podrá soslayar la legalidad y tomar decisiones que las leyes no autorizan, no tiene los pies en el suelo". "Con esos trucos no van a engañar a los catalanes, cuyas preocupaciones siguen despreciando desde hace mucho tiempo", ha añadido. Para Rajoy, es "completamente incomprensible y absurdo" anunciar que se adelantan las elecciones pero seguir en el gobierno catalán nueve meses más.


"Es la constatación de un fracaso profundo que responde al abierto enfrentamiento entre dos formaciones que se disputan el liderazgo del independentismo en Cataluña", ha señalado en referencia a CiU y ERC. Ha insistido en que esas elecciones serán lo que su nombre indica, autonómicas, y el Parlamento resultante de las mismas tendrá las mismas competencias que las que tiene hasta ahora.


"Nada de engaños. Esas elecciones no pueden ser ni serán un camino hacia la fractura de España", ha enfatizado antes de asegurar que el PP catalán va a dar la batalla por la concordia y la unidad y va a tener un gran resultado. En ese objetivo ha explicado que los populares catalanes pueden contar con el apoyo del partido en toda España (está previsto que él mismo acuda el próximo sábado a un acto del PP en Barcelona sobre rebaja de impuestos) y ha resaltado que sólo el Partido Popular es el que garantiza la legalidad, la defensa de la igualdad de los españoles, la responsabilidad y la entrega.


También ha hecho una cerrada defensa de la soberanía nacional para que "nadie prive a los españoles del derecho a decidir lo que es su país". El jefe del Gobierno ha señalado que en los comicios catalanes el PP va a representar la voz de los millones de catalanes que no son independentistas y que, de hecho, ha asegurado que son "la gran mayoría".


"En Cataluña hay muchísimos más catalanes que independentistas, y esa mayoría que los independentistas han borrado de su proyecto van a decir que están hartos de tensiones y simulacros y que los éxitos colectivos nacen de la unidad y no de la discordia", ha añadido. Y el día después de las elecciones catalanas, según Rajoy, el Gobierno seguirá velando por el cumplimiento de la ley.



El presidente se ha declarado hoy orgulloso de su partido y ha asegurado que cuentan "con el aval del cambio" que ya se está notando en toda España, al tiempo que ha negado que exista "un proyecto alternativo viable al del Partido Popular". "El cambio ya se ha producido, el cambio es una realidad y ahora nos toca profundizar en él", ha dicho en su discurso de clausura de la convención nacional del PP.




El dirigente 'popular' se ha preguntado si "¿ha habido cambio, o no, desde que gobierna nuestro partido?". De esta forma ha respondido al ex presidente del Gobierno José María Aznar, quien en su discurso de inauguración de la Convención Nacional del PP no puso en valor las reformas que en esta legislatura ha hecho el Gobierno del PP, algo que le han reprochado en privado algunos dirigentes de actual cúpula del PP. Aznar centró su discurso en llamar a la movilización y preguntó: "¿Aspira realmente el PP a ganar las elecciones?" o "¿Donde está el PP?". El presidente del Gobierno ha afirmado rotundo que ahora "después de tres años" España es el país que más empleo crea. "¿Hay alguien capaz de decir que esto no es un cambio notable?"



El líder del Ejecutivo ha reconocido que su partido "cometió errores y que pudo hacerlo mejor", y que pese a que no puede "garantizar las conductas de todos nuestros cargos públicos". "Esos casos (en referencia a las causas corrupción que afectan al PP) se han producido y merecen una respuesta firme y contundente, pero no podemos permitir que esto oculte el cambio hacia la prosperidad", ha manifestado Rajoy, quien también ha aseverado que "en España no hay impunidad" y que "los policías y los jueces cuentan con más amparo que nunca".



Rajoy ha animado a todos los militantes y cargos del Partido Popular a "seguir adelante" y les ha agradecido y felicitado por su trabajo y esfuerzo durante estos tres últimos años de legislatura.Tras destacar que el PP es el primer partido de España, y lo es por su militantes, el presidente ha puesto en valor que a los populares nunca les ha asustado la "responsabilidad" y no han mirado a otro lado ni han escurrido el bulto, sino que han mirado la realidad "cara a cara" y se han puesto manos a la obra "para transformarla".



La crisis económica, y el "cambio hacia la recuperación" han centrado parte del discurso del presidente quien asegura que "solo en España y EE.UU. mejoran las previsiones económicas", y aunque se ha considerado "prudente", ha reiterado que "el cambio ha llegado". "Nosotros abrimos la puerta de salida de la crisis y la senda de la recuperación, aunque a algunos no les guste oírlo".  "España se ha salvado de una catástrofe que parecía inevitable. Ya no marchamos en la misma dirección, y eso se debe al cambio de un Gobierno socialista a un Gobierno del PP". 

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