Por su parte, Bentley sigue adelante con su apuesta, el Bentayga, montado en la misma plataforma que el Porsche Cayenne. Llegará a los concesionarios el año que viene y desarrollará hasta 500 caballos de potencia, a un precio de unos 300.000 euros.
Bentley espera ganar nuevos clientes a través de dos vías: clientes con los que ya cuentan (que poseen ocho coches de media, incluidos uno o dos SUVs), y dueños de otras marcas que consideran por primera vez la posibilidad de adquirir un Bentley. La marca británica ya está trabajando con sus concesionarios para que éstos no recompren ningún coche diferente a un Bentley en los acuerdos de compra.
De momento, la marca, propiedad del Grupo Volkswagen, ha dado a conocer nuevas imágenes de coche, recorriendo una vía nevada en Suecia, para demostrar todas sus posibilidades, que por lo visto en las imágenes son muchas. Eso sí, es imposible distinguir cómo quedará el diseño externo finalmente.