Mientras Del Bosque deshoja la margarita y no suelta prenda sobre la titularida en la portería española en la ya inminente Eurocopa, uno de los contendientes, Iker Casillas, echa mano de su elegancia con su rival, De Gea. Porque Iker ha elogiado las cualidades de su compañero bajo palos en la selección David de Gea, al que ha calificado como "presente consolidado" que aspira tanto a la titularidad con España como a defender la portería del Real Madrid.
"Todos los que estamos en la concentración pensamos y creemos que podemos jugar. Son 23 jugadores que forman parte de plantillas importantes en sus respectivos clubes, titulares la mayoría y creo que todos los que venimos aquí pensamos que podemos ayudar al seleccionador, pero esa es una papeleta que va a tener él", declaró en El partido de las 12 de la Cadena COPE, expectante ante su papel en la Eurocopa de Francia.
Respecto a la posible titularidad de De Gea en el torneo, Casillas aseveró no intuir "nada" y mostró su respeto hacia la decisión final que tome el seleccionador, Vicente del Bosque. "El míster pondrá a los que crea convenientes en cada partido y en ese sentido por supuesto que respetaré y apoyaré a los compañeros", dijo, insistiendo en su desconocimiento sobre los planes del entrenador.
"No tengo la certeza ni la seguridad de que voy a disputar esta Eurocopa. A mí lo que me gusta es que, a pesar de tener 35 años, mantengo las ganas, la ilusión y sigo compitiendo. En este caso, me ha tocado con Sergio Rico, con David De Gea y muy bien. Ya me gustaría hace 16 años que alguien me hubiera anticipado que iba a vivir todo esto", manifestó, orgulloso de haber sido convocado para su quinta Eurocopa.
Próxima despedida de La Roja
En cuanto a su futuro en la selección, el exmadridista confirmó que no disputará la Euro 2020, aunque no quiso adelantarse sobre su futuro más cercano, el cual tiene "más o menos" decidido, y deseó tener una despedida "sin mucho ruido", similar a la que tuvo en el Real Madrid. "Estoy convencido de que la selección también me agradecerá todo el tiempo que llevo en ella y en las categorías inferiores", apuntilló.
"Está claro que a la siguiente Eurocopa no llego porque son cuatro años más, pero después tengo claro lo que voy a hacer. Ahora lo que me interesa es disfrutar de estos 35 porque espero y deseo que España esté en esa final de París para defender el título que conseguimos en Ucrania y Polonia y que disfrutemos a tope como si fuese el último", alegó.
El guardameta entró incluso a valorar su primera temporada en el Oporto, sobre la que reconoció haberse sentido "bastante bien" en lo personal a pesar de quedarse con la espina de no ganar ningún título. "Ha sido difícil porque el club necesitaba como el comer lograr un título este año para quitarse esos dos años en blanco. Voy a intentar conseguir en estos dos años ganar las dos Ligas, las dos Copas y en Europa hacer algo grande", expuso, añadiendo que todo lo que hace se mira "con lupa".
"Entiendo que cuando pones el listón alto, la gente está esperando al momento de que haya un desliz y lo hemos podido comprobar con otros deportistas, no solo del fútbol. Pero a mí eso me supone que me ponga presión a mi mismo", explicó el bicampeón de Europa.
Por otra parte, Casillas aseveró que su convocatoria se debió a méritos propios, además de reconocer que está "un poco" harto de estar continuamente cuestionado. "Son ocho años desde que el míster está en la selección y nos conocemos, evidentemente, y si no te ve capacitado, no seguirías viniendo aquí. Es lo que le ha pasado a otros compañeros que por desgracia no siguen viniendo", afirmó, satisfecho por seguir recibiendo la llamada de 'La Roja'.
Siempre bajo los focos
"No intento pasar de la actualidad, pero no estoy pendiente, ni me como la cabeza, creo que después de tantos años jugando al fútbol he llegado a controlar un poco eso. Sé que hay 40 cámaras pendiente de mí, se que cualquier gesto que tenga con De Gea o De Gea conmigo va a ser sacado para rellenar programas", amplió, después de llevar toda una carrera expuesta a los focos acentuada "en enero de 2013", fecha de su lesión en un dedo de la mano.
Por último, Casillas se refirió a la undécima Liga de Campeones recaída en las filas madridistas, la primera después de su salida del club, y sobre la que reconoció que la alegría con la que la acogió "no es igual" a las ganadas por él. "Está claro que me hubiese gustado jugar ese tipo de partidos, pero confío en que con el Oporto podamos conseguir algún éxito así en la Liga doméstica o alguna final, por qué no", finalizó.
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