La soprano Anna Feu brilla acompañada al piano por Akika Nomoto y dirección de Manuela N. Lorente

Recordemos que Elvira Hidalgo fue una gran soprano, creadora y pionera a la hora de reivindicar el canto de ellas (además de los tenores)...Una de sus facetas fue la pedagógica, que practicó con los alumnos de la Master Class. Enseñaba cómo hay que respirar, hacer gorgoritos, y manejar la voz. En el espectáculo que pudo verse en la Gleva, se reivindica su vestuario teatral: vestidos como llevaba ella en los años 40 o 50 (que era cuando empezó a ser profesora). También lleva un collar y pendientes (las joyas les gustaban mucho a las cantantes de esa época). En la segunda parte, Anna Feu lleva un vestido de concierto de época, con canca y corsé. Como iría vestida Manon de Massenet, pero con un toque más actual (es el que la soprano catalana suele llevar en las salas grandes).

Sus cenizas viajaron de Milán a su localidad natal Valderrobres (Teruel) para que reposaran en un nicho digno. En la obra y al final, aparece muerta (en la interpretación de Anna Feu) sobre el piano, y recibe una lluvia de cenizas. Antes hay un apagón de luz...La insigne Maria Callas aprendió muchas cosas de Elvira Hidalgo, e incluso se refugió en ella en algunos momentos.Le gustaba mucho la zarzuela, que también practicó.

Dentro del repertorio que se desgrana en el espectáculo (con una parte cantada en italiano) aparecen los siguientes temas:”Canción” de Manuel de Falla (uno de los directores preferidos de la soprano); “Ah non credea mirarti”, de La Sonámbula de V. Bellini; Marinela, de la canción del olvido” del Maestro Serrano (zarzuela); “Carceleras”, de Las hijas de Zebedeo, de R. Chapi (zarzuela); y “Una voce poco fa” (El Barbero de Sevilla) de Rossini.

-Y en la segunda parte del recital 4 arias de la ópera Manon (de Jules Massenet”). Y las arias “Adieux notre petite table”; “Je suis encore toute étourdie; “Voyons Manon, de plus de chimères”; y finalmente “Je marche sus tous les chemins.Gavotte”. Otro de los alicientes es que toca el piano una acreditada profesional japonesa, Akiko Nomoto, que lleva muchos años en Barcelona, con lo que se consigue una fusión de música y canto no desdeñable.

Humor

Anna Feu ha desarrollado una importante carrera como soprano, actuando en lugares como el Carnegie Hall de Nueva York. Actualmente imparte enseñanza en la escuela Eólia (donde trabaja con la pianista Akiko Nomoto).Anna Feu y Manuela Lorentese han entendido muy bien, y han llevado esta obra a distintas salas (básicamente de pequeño aforo), desde el 2018., y poblaciones como Sant Feliu de Guíxols, Valdetorres (Teruel), Mora d¨Ebre...La directora también muestra su faceta interpretativa, con pinceladas humorísticas, en el espectáculo. Su currículum es también considerable: ayudante de dirección con Sergi Belbel; ha dirigido en el Lliure, en el Teatro de la Abadía de Madrid, o en el Corral de Comedias de Alcalá de Henares, y muchas otras en Barcelona (salvo la Beckett).

Se ha especializado en salas alternativas. Confiesa que “hemos pretendido una ópera que sea asimilable para todo el mundo (incluso niños, que han venido con frecuencia), y no tanto para “paladares exquisitos”. Anna Feu añade .”le hemos dado un tono humorístico en algunos pasajes, para que la gente también se lo pase bien, y ría”...

Todos los elementos de una Master Class aparecen en esta ópera y además, Lorente ha pretendido “aprovechar la faceta cómica de clown que tiene Anna”. Durante la interpretación de las arias, fueron afinando la dramaturgia...En cuanto a los idiomas, se utiliza con frecuencia el italiano (“idioma propio de la ópera”), también el francés, y por supuesto: el español. Ambas la definen como “ópera de pequeño formato”.

Alumnos

En una pantalla aparecen imágenes de la soprano. Anna Feu ha aprovechado para introducir como elemento pintoresco, alumnos que tienen en la escuela Eolia. Aquí salen al escenario, para obedecer las instrucciones de la cantante, y además aprenden en pocos minutos (según su teoría en la función)...La escenografía es atractiva con un piano, una mesa tapada de negro, y un taburete donde la soprano tiene sus utensilios.
No descartan volver a la Gleva, cuando la sala esté libre de espectáculos. Y por supuesto, pondrán “toda la carne en el asador” para llevarla a otros puntos de Barcelona, Cataluña, y el resto de España igualmente...