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Harina de trigo, harina de espelta, harina integral... ¿cuál es más sana y adecuada?
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(Foto: EP)

Harina de trigo, harina de espelta, harina integral... ¿cuál es más sana y adecuada?

El cambio hacia una alimentación más saludable es una tendencia que ha ido creciendo en los últimos años, y cada vez más personas están optando por opciones más saludables cuando se trata de elegir los alimentos que consumen.

Una de las tendencias que se ha vuelto cada vez más popular en la última década es el uso de harina de espelta o harina integral en lugar de harina de trigo tradicional.

En este artículo, exploraremos si es saludable y correcto cambiar los productos con harina de trigo tradicional por los de harina de espelta o harina integral.

La espelta y la harina integral

La harina de espelta es un tipo de harina que se produce a partir de un antiguo grano de trigo. Es similar a la harina de trigo, pero contiene más proteínas y fibra.

La harina integral, por otro lado, se produce a partir del grano entero, incluyendo la cáscara, el germen y el endospermo. Es una opción más saludable que la harina blanca refinada, ya que contiene más nutrientes y fibra.

La harina de trigo refinada, utilizada en la mayoría de los productos de panadería y pastelería, se somete a un proceso de refinación que elimina gran parte de los nutrientes y la fibra del grano original. Esto hace que los productos elaborados con harina de trigo refinada sean menos nutritivos que aquellos elaborados con harina integral o de espelta.

Beneficios

En cuanto a la salud, cambiar a productos elaborados con harina integral o de espelta puede tener algunos beneficios. Por ejemplo, la harina integral y de espelta contienen más fibra que la harina blanca refinada. La fibra es importante para la salud digestiva, ya que ayuda a mantener el tránsito intestinal regular y previene el estreñimiento. También puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y cáncer de colon.

Además, la harina de espelta y la harina integral contienen más nutrientes que la harina blanca refinada. Estos nutrientes incluyen vitaminas B, hierro y magnesio. La vitamina B es importante para la salud del sistema nervioso, el hierro es importante para la producción de glóbulos rojos y el magnesio es importante para la salud ósea y muscular.

Sin embargo, también es importante tener en cuenta que el consumo excesivo de harina integral o de espelta puede no ser beneficioso para todos. Algunas personas pueden experimentar problemas digestivos o intolerancia a estos tipos de harina.

Además, es importante tener en cuenta que los productos elaborados con harina de espelta o harina integral aún pueden contener azúcares añadidos, grasas saturadas y calorías, lo que puede aumentar el riesgo de obesidad y enfermedades crónicas si se consumen en exceso.

Conclusiones

Si decide cambiar a productos elaborados con harina de espelta o harina integral, es importante leer las etiquetas de los alimentos cuidadosamente para asegurarse de que estén hechos con ingredientes saludables y no contengan aditivos innecesarios.

También puede ser útil reducir gradualmente el consumo de productos elaborados con harina blanca refinada y aumentar el consumo de productos elaborados con harina integral o de espelta.

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