Se estrenó en Madrid en noviembre del año pasado y, en principio, seguirá programado hasta el 9 de abril en el Teatro EDP Gran Vía. Ayer, domingo 19 de marzo, el recinto estaba absolutamente lleno para ver cantar y actuar a Nina (Francesca), y a Gerónimo Rauch (Robert), protagonistas de ‘Los puentes de Madison, el musical’, bajo la dirección artística de Alberto Negrin y la dirección musical de Gerardo Gardelin.
Con una partitura musical bellísima y compleja —en ella se funde la música melódica con blues y hasta country, que Nina y Gerónimo cantan con auténtico virtuosismo, rodeados también, y entre otros, de artistas y cantantes de la talla de Marta Valverde (Marge), Manu Rodríguez (Bud), Paula Mori (Carolyn) y Franco Yan (Michael), o Inma Mira (Marian /Cantante de Feria / Cover de Marge).
La fábula se sitúa en Madison, en el estado de Iowa (Estados Unidos). Corre el año de 1965. Francesca vive con su marido y sus dos hijos. Tienen una granja y el padre y los dos jóvenes adolescentes se marchan unos días a una feria de ganado a donde llevan un novillo para concursar. Entretanto, y en su ausencia, Francesca, conoce al fotógrafo Robert Kincaid, quien ha llegado a la comarca para retratar los puentes cubiertos de la zona para un reportaje de National Geographic. Francesca, que se siente sola y vive a disgusto con su existencia anodina y en medio de la nada, y nada más verlo se siente atraída por Robert, lo invita a casa a cenar y entre ambos surge un amor incontenible. Pero Francesca no quiere renunciar a sus hijos y tendrá que decidir porque su familia está a punto de volver a casa y Robert debe regresar a Nueva York para ver cuál será su próximo trabajo como fotógrafo.
La romántica historia está en el imaginario de todo el público que, sin duda, ha visto al menos una vez la película del mismo título que protagonizaron en 1995 Clint Eastwood y Meryl Streep. Tanto el musical como la película que dirigió Eastwood están basados en la novela de Robert James Waller, escrita en 1992. El libreto del musical fue versionado en 2014 por Marsha Norman y la música y las letras de las canciones las firma Jason RobertBrown.
El montaje es espectacular (música en directo sin un solo fallo, escenografía imponente con una gran mansión rural, tablones del rodeo durante el concurso ganadero, el gran puente que fotografía Robert, cuidadísimo vestuario de época, estupendos y envolventes efectos sonoros…), y la dirección artística de Alberto Negrin no deja ni un solo fleco suelto del complicadísimo engranaje que conlleva una propuesta escénica de este calibre.
La pareja protagonista de ‘Los puentes de Madison, el musical’ que puede verse en el EDP Gran Vía, es de las que hacen época. La cantante Nina (Barcelona, 1966) celebra este año sus 40 años sobre el escenario y sólo se puede permanecer en primera línea teniendo grandísimas facultades musicales e interpretativas. Lo ha venido demostrando en musicales como Cabaret,Corre, Corre Diva y Mamma Mia!, o en programas de televisión que han calado en el imaginario colectivo de los españoles como aquella primera edición de Operación Triunfo, y en actuaciones musicales que, entre otros logros, la han llevado al Festival de Eurovisión. Y, por su parte, el intérprete y actor argentino Gerónimo Rauch (Buenos Aires, 1978) ha participado también en musicales tanto en España como en Inglaterra, con títulos como Los Miserables, Grease, Jesucristo Superstar, El Médico y Los Miserables o El Fantasma de la Ópera.
Escuchar, ver moverse por ese gran escenario a Nina y a Gerónimo es un placer. Alcanzan niveles inverosímiles en la escala musical y transmiten una verdad a sus personajes que la mitad de los espectadores no abandonan los pañuelos de papel para contener las lágrimas de emoción a lo largo de toda la representación. Y es que la historia de amor que viven entre ambos es de las más románticas que se han escrito en las últimas décadas. Una historia que marca con tanta emoción como realismo que entre el tú y el yo, hay todo un mundo alrededor que, quiérase o no, condiciona para tomar esa decisión final.
Con la dura competencia de musicales que hoy tenemos en Madrid (creo que son 14 los que se ofertan simultáneamente en estos momentos), la elección de ‘Los puentes de Madison, el musical’, es una decisión segura de calidad y excelencia que, además, gustará a toda la familia.
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