'La doncella (The Handmaiden)': Una perturbadora y maravillosa película

Desde el mismo inicio Park Chan-wook nos reta a desafiar la lógica de lo que estamos viendo, una joven campesina coreana es llevada a trabajar a casa de una rica familia japonesa, parece que estamos ante un drama, pero no es así, las cosas no son lo que parecen y las perspectivas de los personajes cambiaran varias veces durante la película, al mismo tiempo que va cambianod el punto de vista de quién nos cuenta la historia. La película está llena de referencias y guiños a otras películas, sus cambios de punto de vista y como los diferentes personajes nos van contando la misma historia recuerda a 'Rashomon', en otros momentos los puntos de conexión con 'Las diabólicas' son evidentes, por otro lado, sus sugerentes escenas eróticas recuerdan la intensidad de las de 'La vida de Adele'.

'La doncella' es una película sutil y bellamente construida, como si el hecho de estar situada en otra época hubiera llevado a su director a rodarla con un aire clásico, sin olvidar, eso sí, su peculiar mirada, violenta y perversa. Visualmente es una maravilla y, a pesar de estar situada en Corea y Japón, sabe llevar muy bien el ambiente victoriano de la novela en la que se basa, 'Falsa identidad' de Sarah Waters, emparentándola con otra película más, 'Suspense' de Jack Clayton.

Toda la película está enhebrada con maestría pero la puntada final es la que deja la mayor sensación perturbadora, haciendo preguntarse al espectador si no será también un personaje dentro de su intrincada narración, esos personajes anónimos que asisten deleitados a las malsanas sesiones de lectura organizadas por el odioso tío de una de las protagonistas. Un final que deja una agridulce sensación de culpabilidad 'voyeur'.

El resultado es clarificador, 'Oldboy' ya tiene una película que le dispute el título de obra definitiva de Park Chan-wook.