Alerta autónomos: el retraso en las cuotas puede suponer aparecer en la lista de morosos

Ser autónomo es complejo y hay que afrontar varios gastos que, en ocasiones, obligan a retrasar el pago de facturas o de las cuotas de los préstamos.

La crisis del coronavirus y la posterior por la guerra de Ucrania y la alta inflación provocaron que muchos trabajadores por cuenta propia tuviesen problemas de liquidez y algunos optaron por retrasar el pago de determinadas deudas.

Cabe recalcar la palabra 'retrasar', no dejar de pagar. Pero una sentencia reciente del Tribunal Supremo ha sentado una jurisprudencia peligrosa para muchos autónomos, pues legitima que en estos casos se les pueda incluir en una lista de morosos.

El diario 'autónomos y emprendedores' se ha hecho eco de la sentencia, fallada el pasado mes de septiembre, en la que el Supremo ha dado la razón a un banco que incluyó a una clienta en la lista de morosos por retrasarse en el abono de las facturas.

Según se indica, siempre pagaba las cantidades adeudadas, aunque en el 70% de las cuotas (a lo largo de 84 meses) lo hizo con retraso y la entidad bancaria decidió calificarla como morosa.

Sentencia controvertida y peligrosa para los autónomos

Con esta sentencia el Supremo ha abierto la puerta a que los bancos u otras entidades puedan meter en la lista de morosos a personas que no hayan cometido un impago.

Hasta ahora sólo se podía incluir en estas listas a alguien que tuviese una deuda pendiente y si esta era superior a 50 euros.

Pero este último fallo considera que la habitualidad en el retraso de los pagos, aunque se acaben abonando, es suficiente para tildar el caso de morosidad.

El citado medio recoge parte de la sentencia que puntualiza que “la deuda existía y la demandante era morosa, ya que no abonaba las cuotas del préstamo concedido por la entidad demandada en el tiempo en el que, con arreglo a lo estipulado en el contrato, estaba obligada a hacerlo",

Los magistrados consideraron que sí hubo un "incumplimiento de contrato" y que ello "legitima" a su inclusión en el registro de morosos.

"El derecho no puede amparar situaciones de claro abuso", han remarcado los jueces.

La sentencia ha generado una jurisprudencia peligrosa especialmente para los autónomos, pues posponer determinadas facturas es algo relativamente habitual.

La inclusión en la lista de morosos tiene unos prejuicios importantes como la imposibilidad de solicitar una línea de financiación, dar de alta líneas móviles e incluso de otros suministros como la luz o internet. También puede implicar la pérdida de clientes o proveedores.

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