Anticipar las decisiones

Desde que comenzó su ronda actual de aumentos de tipos de interés este año, la Fed se ha propuesto informar con anticipación no solo hacia dónde se dirigen los tipos en general, sino también de la cuantía de cada próximo movimiento.

La Fed y otros bancos centrales han utilizado durante mucho tiempo esa línea, conocida como “forward guidance” para dar una orientación a futuro. En la rueda de prensa después de la reunión de mayo, el presidente de la Fed dijo que “es un entorno muy difícil para tratar de dar una guía de futuro con 60 ó 90 días de anticipación y hay tantas cosas que pueden suceder en la economía y en todo el mundo (..) que nos estamos dando tiempo tomar una decisión a medida que se produzcan las reuniones”.

De hecho, otros bancos centrales se enfrentan a desafíos similares y están respondiendo de formas nuevas. La semana pasada, el Banco Central Europeo elevó los tipos de interés más de lo que había prometido en su reunión anterior y no brindó orientación sobre la cuantía de la subida de tipos de la próxima reunión. El Banco de Canadá decidió subir los tipos de interés en una decisión por sorpresa sin haber anticipado el movimiento.

Hoy la Fed finaliza su reunión de dos días en la que se espera que suba los tipos de interés en 75 puntos básicos desde el 1,75% actual. Los mercados también esperan que su presidente, conocedor de la importancia que tienen sus decisiones, siga anticipando la orientación de la política monetaria, para evitar tensiones y un cierto desconcierto en los mercados, ya que parte del éxito de la política monetaria también se basa en las expectativas del mercado.