La política monetaria de la FED y sus proyecciones siguen generando incertidumbre en los mercados. Ayer, el presidente de la FED de Atlanta afirmó que el banco central estadounidense aún debería poder reducir los tipos de interés en medio punto porcentual este año.
Señaló que persiste una gran incertidumbre sobre el impacto de las políticas comerciales y de inmigración, advirtiendo que estos factores podrían afectar dichos pronósticos. Añadió que no prevé un fuerte repunte de la inflación, pero expresó la preocupación de las empresas por las políticas de la administración estadounidense, las cuales podrían impactar en los costes y en la disponibilidad de mano de obra. Asimismo, mencionó que las empresas están evaluando trasladar los nuevos impuestos de importación a los consumidores, lo que podría aumentar los precios y generar presiones inflacionarias adicionales. Además, destacó que el mercado laboral muestra signos de atonía, pese a que el desempleo se mantiene en niveles bajos, en torno al 4%. Advirtió que la combinación de incertidumbre regulatoria, cambios en la política fiscal y la evolución de los aranceles podría modificar las perspectivas económicas de forma significativa.
Por otra parte, las actas de la última reunión de la FED reflejan que, aunque los riesgos de inflación y desempleo parecen equilibrados, la mayoría de los miembros consideran que la política monetaria sigue siendo restrictiva y que desean ver un mayor progreso en la reducción de la inflación antes de ajustar los tipos de interés.