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Emprendedores en Albacete

Enrique Fuentes y Valeria Aragón, el coaching como receta para el crecimiento empresarial

Enrique Fuentes y Valeria Aragón, el coaching como receta para el crecimiento empresarial
miércoles 16 de abril de 2014, 08:06h

Fue en el año 2010 cuando Enrique Fuentes y Valeria Aragón crearon Eleva Escuela de Coaching. Él un ingeniero técnico en informática de gestión y ella licenciada en publicidad y relaciones públicas. Ambos, con cerca de catorce años de  experiencia en el mundo del marketing, la publicidad o la docencia.

Ese amplio recorrido profesional  les llevó a concluir que las empresas españolas, en general, y las albaceteñas en particular, necesitaban cambios mucho más profundos que una estrategia de marketing o una campaña de publicidad. "Necesitan cambios vinculados a la persona, al propósito, al potencial natural del ser humano, que hace los equipos y permite llevar a las empresas hacia adelante", asegura Enrique Fuentes.

"Después de intentar medicar a nuestros clientes con pastillas que no parecían quitar el mal de raíz, entendimos que hacía falta un cambio interno que nos lo podía dar el coaching. Es una herramienta que sirve para conseguir los objetivos pero que parte del interior de las personas porque cada uno es el protagonista de su vida y de su empresa", nos explica Valeria Aragón.

De esa idea nació Eleva, una escuela especializada en el aprendizaje de coaching y en todas las disciplinas útiles y complementarias para el logro de metas empresariales y particulares, como son la PNL (programación neurolingüística), la inteligencia emocional, el crecimiento personal...
Es la primera Escuela de Coaching de Albacete, con un Máster experto en Coaching con Inteligencia Emocional y PNL certificado por ICF (International Coach Federation) y ASESCO (Asociación Española de Coaching), impartido por reputados coaches del todo territorio nacional gracias a la experiencia y trayectoria de su colaboradora D´arte Madrid.

Formación y consultoría

En su proyecto, intentar aportar a las empresas y a las personas aquellos conocimientos y herramientas necesarias para crecer y ser más competitivas. Lo hacen a través de la formación y la consultoría que ellos entienden como "una transformación".
Su oficio es "eminentemente creativo", asegura Valeria y por eso cada problema al que se han enfrentado a la hora de poner en marcha su proyecto empresarial lo han analizado "en su justa medida". Por ejemplo, el de la financiación que, nos dicen,  ha sido como "un elefante que hemos partido en trocitos y abordado con creatividad".

La captación de su clientela funciona a través de los  medios online, al margen de una intensa labor comercial pero nos confiesan que no han necesitado financiación y ni siquiera ha sido necesaria una gran aportación de capital.

"Nuestra empresa es muy flexible para poder hacer lo que nosotros queramos", explica Enrique y, por eso, han evitado los costes fijos que suponen, por ejemplo, unas instalaciones o personal.

Suelen trabajar  in company o, lo que es lo mismo, con acciones formativas a medida de las necesidades de cada cliente, lo que les permite trabajar con libertad, aplicando las dosis de imaginación necesarias en cada caso y contando con los colaboradores más oportunos en cada momento.
"Si lo piensas bien, necesitas expandirte. Cada persona y organización, siente la necesidad de expandirse, aumentando su potencial y rendimiento. Vivir el propósito para el que nacemos es sin duda la respuesta a la desmotivación, la frustración y el fracaso tanto particular como empresarial". Y es una teoría que se aplicaron a sí mismos cuando surgió la idea de poner en marcha su proyecto.

Cuando les preguntamos si creen en las ayudas o en las subvenciones, ellos lo tienen muy claro: "Evidentemente, toda ayuda es poca pero la responsabilidad de emprender depende de ti mismo. No se puede estar pendiente de si tus padres o los políticos te van a ayudar o de si el nivel educativo es el adecuado para emprender", dice Enrique Fuentes.

"Lo primero es creérselo", añade Valeria Aragón, "cuando uno ha visualizado su proyecto, tiene fe y es capaz de materializarlo aunque sea en una hoja dividiéndolo en pequeños objetivos".

Están convencidos de que cada persona tiene un talento único que le diferencia del resto y es desde ahí es desde donde tienen que empezar a trabajar su proyecto.

Su escuela de coaching fue creada, precisamente, "con el fin último de expandir su conocimiento, acompañando a cada persona o grupo de personas en un fascinante proceso de cambio que le llevará al éxito. Es decir, Eleva existe para que tu tengas éxito en aquello que realmente te propongas", nos cuentan.

"No es magia, no somos gurús, ni vendedores de aire, todo nace y acaba en ti" es uno de sus lemas a la hora de funcionar. Siempre han creído en eso de 'si no encuentras un trabajo que te guste, créalo tú' y a ellos, por cierto, les ha ido bastante bien.

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