El ”boom” de las furgonetas Camper: qué son y por qué son tendencia

El ”boom” de las furgonetas Camper: qué son y por qué son tendencia.

Una Camper es un vehículo autopropulsado que sirve tanto como para dormir como para viajar. La diferencia fundamental con las autocaravanas tradicionales reside en que las Camper son furgonetas que han sido acondicionadas a partir del vehículo original y no son tan grandes, espaciosas y cómodas como las autocaravanas.

Una práctica que ha aumentado con la necesidad actual de salir de las ciudades y disfrutar de la libertad que dan y aire libre en donde queramos, por ejemplo las Kangaroo Campers en Madrid.

Aquí, precisamente, radica su primera gran ventaja: su interior está personalizado al cien por cien, según el gusto y acomodo del propietario, en función de la finalidad a la que éste quiera destinarla.

¿Qué significa “Camper”?

“Camper” es “campista”, en inglés, y procede del sustantivo “camp” (“campo”). Hoy en día el término va ligado a los vehículos Camper. Su origen se remonta a la mitad del siglo pasado, cuando hacia los años sesenta se inició el movimiento “hippie” y se puso de moda el contacto con la Naturaleza.

Las Camper tienen un panel de control para comprobar el estado de la batería auxiliar; el de la batería interna; el nivel del depósito de las aguas limpias; el de aguas grises; el encendido de la bomba de agua; el de la luz exterior; si se está cargando la batería auxiliar, en caso de estar conectadas a una toma eléctrica exterior (por ejemplo, en un camping), o si está cargando dicha batería auxiliar con el motor encendido.

La mayoría de estos vehículos cuenta con depósitos de aguas limpias (o “aguas blancas”), de unos cien litros o más de capacidad. No todas las Camper son iguales; cada una tiene un funcionamiento distinto, pero muy similar de un modelo a otro.

Más ventajas

• Manejabilidad. Aunque en general las Camper cuentan con menos espacio en el interior que las autocaravanas –y, por tanto, tienen menos comodidades–, una de sus principales ventajas es que son mucho más manejables.
• Pasan más desapercibidas. Normalmente, no mantienen ningún signo exterior de que su equipamiento interior permite dormir en ella.
• Más libertad de movimiento. Dormir dentro de un vehículo es una práctica prohibida en muchos municipios de nuestro país, salvo en los lugares especialmente indicados para ello (zonas de acampada, o cámpings). Esta ventaja convierte a las Cámper en muy populares entre los amantes del aire libre ya que, al pasar inadvertidas, pueden acampar en más lugares y estacionar en muchos cascos urbanos donde con una autocaravana no podrían.

Cómo “camperizar”

Para “camperizar” una furgoneta hay que transformarla a vehículo vivienda. La normativa de cada país exige unos requisitos pero casi todos piden un proyecto de ingeniería de todo el proceso, la documentación del fabricante del vehículo autorizando la transformación y la aprobación de la Inspección Técnica de Vehículos sobre la homologación del vehículo como furgoneta vivienda.

Es posible evitar este proceso cuando el mobiliario del interior no está atornillado al chasis del vehículo y es desmontable. Normalmente, en este caso el mobiliario es más básico, pero es una opción cada vez más elegida por los aficionados a los viajes en furgoneta.