A veces cuando nos toca escribir una de esas necrológicas que nunca apetecen, y menos cuando es un artista que te gusta, tiramos del "se ha ido demasiado pronto" o "qué desgracia, no le tocaba". En el caso de Shane MacGowan, ex cantante de los Pogues, no se puede decir nada de eso, es bastante milagroso que con la vida que llevó llegara hasta aquí, así que toca intentar no ponernos muy tristes, sacar la botella de Jameson o la pinta de Guinness y brindar porque Shane MacGowan se ha ido finalmente a donde fluyen arroyos de whisky.
MacGowan era de familia irlandesa pero nació en Inglaterra, a donde su familia había emigrado, su paraíso en la tierra era la verde Irlanda donde iba a pasar los veranos con su familia, bebiendo, fumando y cantando canciones folk con su familia, el futuro cantante agregaría esta frase lapidaria sobre su imagen del paraíso, "era como vivir en un pub".
Antes de cumplir los 18 ya había sido ingresado en un psiquiátrico por su consumo de alcohol y drogas, fue uno de los primeros punk de Londres y saltó a la fama por una foto en uno de los primeros bolos de los Clash en los que aparecía sangrando por la oreja bajo el siguiente titular "Canibalismo en un concierto de los Clash". El espíritu punk no le abandonó nunca y se lo imprimió a su particular lectura del folclore irlandés, en 1982 fundó los Pogues, que incialmente se llamaron Pogue Mahone, que en gaélico significa "bésame el culo". Puro MacGowan.
Ron, sodomía y latigazos
En 1985 apareció el segundo trabajo de la banda y la primera de sus obras maestras 'Rum Sodomy & the Lash'. "Nada sino ‘Ron, sodomía y latigazos’" es, supuestamente, la respuesta que dio Winston Churchill cuando le hablaron de la gloriosa tradición naval británica. No es de extrañar que la banda de folk irlandés más punk de la historia decidiera llamar así a uno de sus discos. MacGowan sacaba a relucir una voz macerada en alcohol para cantar unas canciones con las que macerarse en alcohol, como bien conoce el detective McNulty de la policía de Baltimore (que se despidió a los sones de The Body Of an American', como el resto de 'The Wire'), pero tampoco le faltaba su corazoncito como en las inolvidables 'A pair of Brown eyes' o 'Dirty old town'.
Estaba en el mejor momento de su carrera pero si le veías por la calle, no solo te cruzabas de acera sino que no hubieras dado un duro porque sobreviviera al siguiente fin de semana. Al año siguiente llegó el maravilloso EP 'Poguetry in Motion', producido por Elvis Costello, donde aparecían la mencionada 'The Body of an American' o una de mis canciones favoritas de los Pogues, 'A Rainy Night in Soho'.
En 1988 publicaron su segunda, y última, obra maestra, 'If I Should Fall from Grace with God', donde expandían su sonido y seguían llegando los clásicos, como la maravillosa canción titular o la imparable 'Fiesta', un himno a las vebenas de verano en España, inspirada por un viaje a Almería, pero, sobre todas, sobresalía la canción por la que siempre será recordados, una de las mejores canciones navideñas de todos los tiempos, triste y desoladora, pero altamente coreable. "Pude haber sido alguien" cantaba Shane McGowan en su mejor modo Marlon Brando, "como cualquiera" le respondía Kirsty MacColl (la hija del tipo que había escrito 'Dirty Old Town') bajándole los humos. La Navidad también puede ser un tiempo difícil, aunque, pase lo que pase, lo importante es que nunca, nunca, falte el alcohol.
Siguieron llegando algunos discos notables, con canciones como la soulera 'Yeah Yeah Yeah Yeah' pero el resto del grupo se cansó de su comportamiento poco profesional y le despidieron, tanto MacGowan como la banda sacaron trabajos bastante aceptables pero nunca volvió la magia de su periodo dorado, aunque hubo reuniones en directo.
Es el momento de decirle adiós y hacerlo con 10 muestras del enorme talento de un tipo que se bebió la vida a grandes sorbos:
Si (
No(
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