Las personas sin hogar que duermen en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas ya no podrán hacerlo a partir de hoy. Así lo ha informado Aena para culminar con la crisis de los sintecho que lleva meses intentando solventar.
Cerca de 500 personas duermen cada día en las instalaciones del aeropuerto de Barajas para evitar las calles, pero tras meses de tensiones, peleas, problemas de higiene, quejas de los usuarios e incluso un muerto en los baños, Aena escaló el problema a las autoridades competentes.
El Ayuntamiento de Madrid responsabilizaba al Gobierno y este exigía al consistorio su implicación. Pero tras la implicación del Defensor del Pueblo el ayuntamiento habilitó un nuevo centro de acogida para las personas sin hogar que pernoctaban en el aeropuerto.
Prohibido pernoctar en Barajas desde hoy
Ante esta situación, Aena ha decidido prohibir a este colectivo pasar la noche en el aeropuerto a partir de hoy 24 de julio.
"Una vez disponible el centro de acogida para las personas que pernoctan en Barajas, diligente y específicamente habilitado por el Ayuntamiento de Madrid en el marco de sus amplias competencias administrativas en asuntos sociales, las personas que duermen en la Terminal T4 están siendo informadas de que, a partir de mañana 24 de julio, no podrán permanecer en las instalaciones", han comunicado.
Han asegurado que seguirán facilitando la ayuda de los trabajadores sociales y de las entidades del tercer sector para guiar a estas personas al nuevo centro disponible.
Desmienten la plaga de chinches
La entidad ha insistido en que los aeropuertos no son infraestructuras preparadas para habitar, sino que son instalaciones de paso.
Ha aprovechado también para desmentir la existencia de una plaga de chinches, como se había difundido en varios medios de comunicación que ligaban este problema con el sinhogarismo.
Aena ha subrayado que las tareas de limpieza y desinfección son constantes en el aeropuerto y no existe tal plaga.
Este aeropuerto lleva desde 2019 incrementando la presencia de personas sin hogar, algunos incluso con trabajos durante el día. Aena ha intentado limitarlo al máximo retirando bancos y enchufes, impidiendo el paso nocturno a personas que no vayan a viajar...Pero con la creación del nuevo centro de acogida ha abogado por impedir del todo su estancia.