Aena ha decidido mover ficha para intentar minimizar el problema del acúmulo de personas sin hogar en el aeropuerto de Barajas y ha informado de las nuevas restricciones.
El organismo ha decidido el cierre nocturno del aeropuerto Adolfo Suárez y restringirá el acceso en horas de baja intensidad a trabajadores y a viajeros.
Hasta ahora el acceso al aeropuerto era libre y cualquier persona podía entrar en las instalaciones aunque no fuese a viajar, pero dado el problema de los sin techo, Aena ha decidido tomar medidas ante las actuaciones "insuficientes" de la comunidad y el ayuntamiento para solventarlo.
Y es que desde hace meses, en el aeropuerto madrileño se está incrementando el número de personas sin hogar que duermen o hacen vida en el aeropuerto. Según el organismo alrededor de 500 sin techo pernoctan cada noche en las instalaciones provocando situaciones de inseguridad e insalubridad. De hecho, en marzo murió un indigente en los baños.
"Con el fin de contribuir a que la situación no empeore -prosigue el comunicado-, Aena reforzará las medidas operativas a su alcance intensificando los controles de acceso existentes en franjas horarias de baja intensidad en la programación de los vuelos", ha informado Aena en un comunicado.
Además, ha iniciado formalmente un requerimiento legal al ayuntamiento de Madrid para que atienda las necesidades habitacionales de las personas sin hogar que acuden a Barajas.
Solo viajeros y trabajadores durante la noche
Unas franjas en las que solo podrán acceder los viajeros con tarjeta de embarque, sus acompañantes y los trabajadores del aeropuerto.
El organismo ha recordado que los aeropuertos no tienen las condiciones necesarias para vivir y que son infraestructuras "de paso".
Mientras, desde la Comunidad y ayuntamiento de Madrid responsabilizan al Gobierno central ya que las personas sin hogar hacinadas en Barajas requieren de un plan de acción social impulsado por el Ejecutivo.
Y el Gobierno también echa balones fuera asegurando que los asuntos de sinhogarismo corresponden al ayuntamiento y que si se detectan solicitantes de asilo lo tienen que comunicar al Ejecutivo central, algo que insisten en que no ha ocurrido.