El mandatario olvida los pactos previos que han posibilitado a su Gobierno atribuirse algunos méritos
Sea como fuere -y exhibiendo el infortunado (aun con ojos imparciales: un cambio es -para bien o para mal-, eso: no pretender que sigan los mismos) lema de 'El cambio real', el candidato del PSC a la Generalitat, José Montilla, ha recorrido este sábado todas las circunscripciones catalanas, exhibiendo su supuesta obra de Gobierno y rodeándose de sus candidatos por Barcelona, Girona, Lleida y Tarragona.
Montilla ha empezado su 'rally' preelectoral en Girona, donde ha resaltado la inversión en infraestructuras como el túnel de Bracons y la construcción de desalinizadoras. "Hemos solventado el abastecimiento de la anilla de Barcelona. Y lo hemos hecho a través de la construcción de desalinizadoras y con el reequilibrio de las cuencas internas", ha afirmado tras presentar la lista socialista por Girona, encabezada por los consellers de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, y de Salud, Marina Geli.
Barcelona, decisiva
Posteriormente, Montilla se ha dirigido a Barcelona donde ha afirmado que la capital catalana será decisiva para ganar en la carrera de las elecciones del 28-N, y se ha mostrado confiado en ganar la batalla de la conurbación y sus comarcas ante CiU, con quien Barcelona "estaba olvidada, ignorada y despreciada". Posiblemente, sin evocar que el recuerdo socialista de la ciudad -aunque sea a nivel municipal- nos deja ciclisttas patrocinados que atropellan por las aceras, garrulos que miccionan en persianas o 'multicultis' a los que hay que dejar hacer lo que les dé la gana porque queda bonito y muy 'guay' (en oposición a la gente de orden que al mismo significado le aplican el término 'cool').
En una breve intervención durante la foto de familia de la lista socialista en Barcelona para las catalanas de noviembre, que ha definido como "sin duda, el mejor equipo", Montilla ha instado a redoblar esfuerzos para explicar el trabajo hecho y los nuevos proyectos. Según el presidente de la Generalitat, CiU no ha creído nunca en Barcelona ni en su potencial. "Para CiU la plaza Sant Jaume fue durante muchos años una trinchera para la confrontación política", ha dicho, sin pensar en el efecto bumerang que pueda suponer que en la otra acera ha mandado siempre el socialismo: pero, claro, para ello, sólo cabe contraponer la actitud que, a su juicio, ha mantenido el socialismo municipal. Y, así, ha dicho que "para nosotros (Barcelona es) un espacio de cooperación, confianza y trabajo para los ciudadanos de la capital y el área metropolitana". "Si ganamos Barcelona, ganaremos Cataluña", ha remachado.
Luego, el primer secretario del PSC ha ido a Reus para presentar a los integrantes de la candidatura por Tarragona, y ha subrayado que el Govern ha tratado de superar "carencias históricas" en las comarcas del Priorat, Conca de Barberà, Baix Ebre y Montsià.
El líder del PSC ha hecho un llamamiento a los integrantes de la lista tarraconense a "trabajar para recuperar la economía y el empleo, y garantizar el bienestar, el progreso y el futuro".
La 'tournée' preelectoral de Montilla ha concluido en Lleida, donde ha resaltado este sábado proyectos del Govern como el del canal Segarra-Garrigues o el Aeropuerto de Lleida-Alguaire pese a que "algunos ahora los cuestionen".
Montilla ha presentado a la candidatura del PSC en Lleida para las elecciones catalanas junto al Aeropuerto de Alguaire, y ha afirmado -da la sensación que adhiriéndose a un 'laissez faire, laissez passer' ("le temps", parece querer decir refiriéndose a la segunda parte de la frase), absolutamente opuesto al espíritu del mensaje, como si el presidente restara importancia a la rápida rentabilidad que debe ser el objetivo principal-, en referencia a CiU, que "algunos piensan que las infraestructuras tienen que ser rentables económicamente al día siguiente de que se hagan".
Montilla ha defendido que el tripartito ha sentado las bases del desarrollo futuro de las comarcas de Lleida "recuperando proyectos que había en los cajones". "Este Govern tenía como objetivo solucionar déficits históricos y que no quedase ni un pueblo o comarca olvidada", ha subrayado.